NACIMIENTO LA OLIVA (FUERTEVENTURA), EN 1956.

CARGO TENIENTE CORONEL DEL EJERCITO DE TIERRA DESTINADO EN LA OFICINA DE COMUNICACION DEL COMANDANTE MILITAR DE ZARAGOZA Y TERUEL. HA SIDO EL JEFE DE PRENSA EN LA BASE ESPAÑOLA DE DIWANIYA (IRAK).

A pesar del reciente ataque a cinco militares españoles en Irak, afirma que la seguridad en la zona bajo control de España ha aumentado notablemente. Durante dos meses y medio ha ejercido como jefe de la oficina de prensa de la base de Diwaniya y asegura convencido que volvería al Golfo Pérsico.

--¿Hasta qué punto las tropas españolas han logrado mermar el caos en su zona tras la guerra?

--Uno de los primeros deseos que expresaron las autoridades de Diwaniya y Nayaf fue que se aumentara el nivel de seguridad. La Brigada Plus Ultra ha conseguido notables avances en ese sentido.

--Pero ya se ha desactivado un explosivo junto a Base España y el pasado miércoles hirieron a cinco militares....

--La amenaza es real, como se ha visto esta semana. Pero eso no quiere decir que haya aumentado el descontrol, porque pueden surgir actos puntuales. Nadie está libre de posibles acciones terroristas.

--El día en que fallecieron los siete agentes del CNI, usted tuvo que dar la cara. ¿Cómo recuerda aquella jornada desde la distancia? ¿Fue su peor día allí?

--Desde luego, los días en los que fallecieron los siete compañeros y el sargento Puga fueron los más duros. Además, al estar fuera de España la tristeza aumenta. En el caso de los agentes, recuerdo aquel día como un día de dolor. Recibimos 48 llamadas en dos horas. Supuso un golpe muy duro porque fueron muchos de una sola vez y por las circunstancias en las que murieron. Pero debíamos seguir trabajando por mantener la seguridad.

--Usted estuvo en Bosnia. ¿Ha sido más dura esta misión, como afirman muchos compañeros?

--Los puestos que he ocupado en estas misiones han sido distintos. No me ha parecido más dura, aunque quizás el clima, la mayor distancia de casa, la cultura y el idioma sí han complicado la labor.

--¿El ataque contra los carabinieri y la muerte de los siete compañeros les hizo sentirse vulnerables?

--No especialmente; existía una amenaza y le hacíamos frente con medidas adecuadas.

--En los últimos meses se han sucedido varias ofensivas contra la población iraquí y líderes religiosos. ¿Se palpa la posibilidad de que estalle una guerra civil?

--Uno de los pilares del futuro democrático de Irak pasa por que las distintas facciones creen una Constitución armónica.

--Sin embargo, todos los grupos religiosos tienen sus milicias y luchan por el poder, por lo que la tensión es evidente.

--Los problemas han surgido fruto de las acciones terroristas, que pretenden desestabilizar la reconstrucción. Eso sí, los imanes influyen mucho en lo político y económico.

--En Diwaniya existen bandas de delincuentes y de terroristas. ¿Cuáles de estos grupos suponen la principal amenaza?

--La mayoría de las acciones violentas eran de traficantes de armas de drogas, salteadores de caminos... Sí es cierto que había un nivel de riesgo, pero no puede atribuirse a un grupo concreto. Además, cuando sales no puedes garantizar que no se inmole alguien contra ti.

--¿En qué tipo de operaciones las los españoles se enfrentan a mayores peligros?

--En la desactivación de explosivos y en la recogida de munición de gran calibre abandonada en antiguos cuarteles. Igualmente, en todas las operaciones en el exterior, como patrullas o convoyes.

--¿Quienes roban el armamento de los antiguos cuarteles suelen ser delincuentes?

--A menudo era gente pobre que trataba de llevarse todos los materiales aprovechables como las vainas de latón y los elementos de cobre, que luego revendían.

--Muchos efectivos que volvían de Irak se quejaron de la dificultad para realizar trabajos humanitarios. ¿Apenas han podido desarrollar ese tipo de labores, habituales en otras misiones?

--A lo mejor no se han hecho tantos repartos de ayudas. Pero sí se han gestionado varios millones de dólares en proyectos de cooperación en hospitales, escuelas, fábricas...