El presidente aragonés, Marcelino Iglesias, afirmó ayer que Valencia tiene "todo el derecho del mundo" a pedir que se resuelvan sus problemas hidráulicos y, por eso, que plantee un recurso ante la derogación del Plan Hidrológico Nacional "está dentro del orden de las cosas, de la lógica".

Iglesias se refirió a las declaraciones del jefe del Ejecutivo valenciano, Francisco Camps, quien dijo el viernes que la derogación del trasvase del Ebro será un "agravio intolerable" a su región y añadió que su paralización mediante el "decreto del no" tendrá una respuesta jurídica mediante la presentación de un recurso.

Iglesias aseguró que "no va a caer en la tentación" de emprender "batallas verbales" ya superadas y en las que Aragón "no ha caído nunca". Además, aseguró que Aragón "nunca" ha cuestionado que el Levante tenga derecho a resolver sus problemas hidráulicos, pero siempre ha dicho que no había sólo una manera y que la que se eligió --por el trasvase-- "a nosotros nos iba muy mal". Las alternativas, por el contrario, son "más económicas, más rápidas y tienen menos costos ambientales" y los gobiernos valenciano y murciano "se darán cuenta de que existe voluntad de resolver sus problemas con el agua".

El PAR pidió al PP, ante la moción que defenderá hoy ese partido en el Congreso de los Diputados para ejecutar el PHN, que asuma que han perdido "la batalla" del trasvase porque está muerto. Por otro lado reclamó al PSOE que materialice "ya" la derogación del trasvase, explicó el secretario general del PAR, Juan Carlos Trillo.

El presidente valenciano reiteró ayer su compromiso de defender "jurídica y políticamente" el cumplimiento de la ley del Plan Hidrológico Nacional (PHN), así como de "las expectativas económicas, sociales y de todo tipo" que ha generado. Camps insistió en que el Gobierno valenciano apoyará todas las iniciativas jurídicas y sociales que defiendan la llegada del agua del Ebro a la Comunidad Valenciana.

Desde Murcia, el Consejo Asesor Regional del Agua aprobó un documento que solicita al Gobierno central la no derogación del trasvase del Ebro a Levante hasta que no se ofrezcan alternativas y éstas sean consensuadas. El Consejo es un órgano formado por la Administración regional, patronal, UGT, organizaciones de regantes, de usuarios y agrarias.