La provincia de Teruel ha encontrado en la cuarta ola de coronavirus en Aragón su particular caballo de batalla porque, sin duda, el territorio atraviesa su peor momento de la pandemia. Ha sido ahora, en el último mes y fruto de las reuniones y los encuentros en Navidad, cuando Teruel ha alcanzado su pico máximo de contagios desde que comenzó la crisis sanitaria en marzo del 2020.

Esta circunstancia lleva a que la incidencia acumulada a siete días en la provincia, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad, sea la peor de todo el país. El dato en esta zona de Aragón es de 407 casos por cada 100.000 habitantes, el más negativo de una lista que sigue Palencia, con 346 casos; Cádiz, con 323 casos; Almería, con 298; o Soria, con 291.

Los focos de la provincia de Teruel, principalmente, se encuentran en la propia ciudad y en los municipios de la zona sanitaria de Alcañiz, donde las incidencias sin duda son las más altas de la comunidad de Aragón y, de hecho, su tendencia elevada impiden cualquier relajación de las medidas, tal y como sí se ha hecho en otras zonas. Aquí se mantienen los confinamientos y unas restricciones endurecidas. En las últimas 24 horas, la zona básica de salud de Teruel Centro ha sido la que más casos ha comunicado en la comunidad, con un total de 24 contagios; seguida precisamente de los 21 de Alcañiz.

También la transmisión desatada en comarcas turolenses como la de las Cuencas Mineras, donde se pidió el autoconfinamiento en poblaciones como Utrillas, han contribuido a esta elevada incidencia. De hecho, el índice en esta la zona, a la que pertenecen municipios como Escucha o Montalbán, es ahora de 899 casos por cada 100.000 habitantes. En las últimas horas se han detectado 7 positivos más.

Huesca, la nota positiva

En esta maraña de cifras y números, el contrapunto a lo que sucede en la provincia de Teruel está en la de Huesca, donde la cuarta ola del covid prácticamente ha remitido y su incidencia acumulada a siete días es la segunda mejor de la península, solamente superada por la comunidad de carácter uniprovincial de Cantabria. En este sentido, el territorio altoaragonés registra el dato de 78 casos por cada 100.000 habitantes, según la información del ministerio, mientras que en Cantabria alcanza los 62,13, el más bajo de España. Las Islas Baleares, con 77 casos, también tiene un dato ligeramente mejor que Huesca. Otras zonas del país que atraviesan un buen momento son las provincias de Lugo, con 76 casos por 100.000 habitantes; Ourense, con 86; Cáceres, con 88; o Albacete, con 89 casos de incidencia a siete días.

En cualquier caso, la situación de la provincia altoaragonesa es evidente que es muy positiva y está a años luz de la de Teruel. Eso ha llevado a la DGA, en los últimos 15 días, a desconfinar primero la capital y, desde ayer, a relajar las medidas en la provincia al volver a permitirse horarios hasta las 20.00 horas en las actividades no esenciales.

En Aragón, la incidencia acumulada ahora es de 234 casos. En las últimas 24 horas se han detectado 491 nuevos contagios correspondientes a los resultados de 4.231 pruebas, donde la tasa de positividad es del 11%. Las cifras han subido ya que las del pasado lunes se correspondían al domingo, cuando se realizan menos test, mientras que las de las últimas horas se refieren a contagios detectados ya el lunes.

La tendencia en la comunidad es descendente, aunque en los hospitales todavía hay 741 pacientes con covid ingresados. De ellos, 92 están en la uci y 649 en planta. La cifra ha subido en 13 personas más, de las que cuatro más han ingresado en intensivos, y nueve en cama convencional. La situación, según prevé Sanidad, es tender a la estabilización de los ingresos, aunque en las ucis se tardará todavía unos días en comprobarse la bajada. También la tasa de mortalidad, que ha crecido tras la Navidad, se espera reconducir en el medio plazo