El Paraninfo de la Universidad de Zaragoza acoge la exposición itinerante "L'aragonés, un patrimonio común", en la que se trata de dar a conocer la situación actual del aragonés en la Comunidad que arranca con las primeras evidencias orales que se remontan al siglo VII cuando ya era una lengua consolidada, aunque no fue hasta el siglo X cuando se empleó en textos escritos.

Las primeras palabras escritas de aragonés se remontan a su aparición en Las Glosas Emilianenses que se encuentran a modo de anotaciones al lado de algunas palabras de textos escritos en latín en el monasterio de San Millán de la Cogolla en La Rioja.

Esta muestra distribuida en tres ámbitos expositivos recala en el Paraninfo con el objetivo de fomentar la diversidad cultural y lingüística de Aragón y propiciar la tolerancia y el respeto a las minorías.

La vicerrectora de Cultura y Proyección Social, Yolanda Polo, ha presentado esta exposición, que se inaugurará este jueves a las 19.30 horas, junto a Fernando Rivarés, consejero de Economía y Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza; José Ignacio López Susín, director general de Política Política Lingüística del Gobierno de Aragón; Bizén Fuster, delegado de Archivos y Bibliotecas de la Diputación de Zaragoza; y María Isabel Rojas Serrano, coordinadora de la exposición.

Con la muestra se trata de poner en valor que Aragón, una comunidad en la que además del idioma español también conviven en diferentes zonas de la Comunidad el aragonés y el catalán, posee una extraordinaria riqueza y diversidad lingüística, de la que los propios aragoneses no son totalmente conscientes o no valoran en sus justos términos, han destacado en la presentación.

En la muestra se ponen de relieve los primeros vestigios contando su origen histórico, mostrando documentos escritos desde la Edad Media hasta nuestros tiempos, también se pueden ver algunos documentos inéditos o que nunca han sido expuestos, y que han aflorado durante las labores de preparación de la exposición.

También se hace hincapié en cuales han sido las principales actuaciones que llevan a cabo sus hablantes para conservarlas y dignificarlas.

La muestra, organizada por el Gobierno de Aragón y la Cátedra Johan Ferrández d'Heredia de la Universidad de Zaragoza, se enmarca dentro del Año Europeo del Patrimonio Cultural y a través de una línea de tiempo mostrará documentalmente el pasado y el presente de la lengua, a través de su fonética, de las distintas variedades dialectales, la literatura culta y popular y su música, con el objetivo de divulgar y fomentar entre los visitantes el respeto, la convivencia y el entendimiento.

Ahora se pueden contemplar algunas joyas como textos en aragonés del siglo XII; una carta de 1309 dirigida al rey Jaime II, los Fueros de Miravete de la Sierra del siglo XIII; documentos relativos a la construcción de la muralla o el puente de Piedra, ambos del siglo XV; villancicos barrocos del siglo XVII; o manuscritos de Joaquín Costa, entre otros.

José Ignacio López Susín ha defendido que la muestra pone de manifiesto "el rico patrimonio lingüístico que tenemos en Aragón" y ha recordado que hace dos años se puso en marcha 'Agora x l'aragonés' que sirve para unir "todas las patas de la sociedad y una cuestión fundamental es visibilizar el patrimonio cultural y lingüístico en el pasado".

En este sentido ha recordado que el aragonés fue la lengua general del Reino y en la que se escribieron "los Fueros, en los que se pronunció la cancillería" además de contar con una rica producción literaria que llevó a que "los primeros textos clásicos griegos que se tradujeron a una lengua romance fue al aragonés".

Por su parte Bizén Fuster ha lamentado que esta muestra "no se haya producido en los últimos cuarenta años" por lo que en su opinión hay que "ser conscientes de donde estamos y lo que no hemos hecho en los años de democracia" en la cuestión de las lenguas aragonesas.

"Es la primera vez que se realiza una muestra general de esta magnitud y de estas características y es imprescindible e importantísimo que para amar una cosa hay que conocerla. Sin conocer el aragonés, su realidad, su historia, su evolución, difícilmente se puede defenderlo", ha dicho.

Fuster ha recordado que en 1915 se creó por parte de la DPZ el Estudio de Filología de Aragón "siguiendo la estela" del Institut d'Estudis Catalans y de entidades de este tipo que desarrollaba una destacada labor filológica pero también trabajaba en otros aspectos de la cultura desechando que fuese un centro normativizador de la lengua aragonesa y donde se formó "por ejemplo, María Moliner, una de nuestras más insignes literatas", a la vez que ha lamentado que en aquel momento hubiese "más sensibilidad" por el aragonés.

Fernando Rivarés ha explicado la labor que se está desarrollando desde el Ayuntamiento que hace que "la mayor parte de fablans que hay en Aragón se encuentran en la provincia de Zaragoza, fundamentalmente en la ciudad" y que si bien es "una lengua minorizada, no es una lengua muerta y hay que hacer lo posible porque siga viva".

Además ha negado que el aragonés se pueda incluir en la catalogación de folclore sino que "si se quiere presumir de la defensa del patrimonio, material e inmaterial, la lengua y la tradición oral son fundamentales".