El hospital Miguel Servet de Zaragoza presenta una demora de más de un año (15 meses) para iniciar un proceso de fecundación in vitro y la lista de espera alcanza las 473 personas. Así lo confirma el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, en una respuesta parlamentaria publicada en el Boletín Oficial de las Cortes de Aragón (BOCA).

El Servet es el único hospital público de la comunidad que realiza este procedimientos y la problemática se acentúa, según el documento, cuando la paciente debe someterse a nuevas sesiones de fecundación. «Hay una demora de 15 meses para el primer ciclo y de 10 meses para los siguientes», reza en la respuesta.

La inclusión de las candidatas en la lista de espera para la realización de estos procedimientos se produce atendiendo a criterios como que sean mujeres mayores de 18 años y menores de 40, que no tengan hijos previos, y que no presenten ningún tipo de patología en la que el embarazo pueda entrañarle un grave e incontrolable riesgo, tanto para su salud como para la de su posible descendencia.

Así, según datos del Departamento de Sanidad, en torno al 40% de los ciclos de fecundación in vitro en el Servet «acaban en gestación». Los números confirmados son del 2016 y, entonces, se lograron 187 gestaciones, de las que 17 provinieron de embriones congelados. «Son gestaciones conseguidas, si bien no todas llegan a término», precisaron las mismas fuentes.

DOS MESES

Por otro lado, la lista de espera en el Servet para la inseminación artificial, a fecha 28 de febrero, es de 39 pacientes, mientras que la demora media es de dos meses tras su inclusión en la lista de espera por parte de la Unidad de Reproducción Asistida del hospital.

Asimismo, tres hospital públicos aragoneses realizan estas inseminaciones. En este caso, en el Servet se lograron 71 gestaciones tras esta técnica; 29 en el Clínico; y 8 en el hospital San Jorge de Huesca. Todas durante el 2016.

Estos tratamientos de reproducción humana asistida no se aplican a las personas que presenten, entre otras, esterilización voluntaria previa o existencia de contraindicación médica documentada para el proceso de la esterilidad o de la gestación.

Tampoco a pacientes que puedan presentar «imposibilidad» de cumplir el tratamiento por motivos relacionados con la salud, familiares o relacionados con el entorno social.