El consejero de Sanidad, Ricardo Oliván, ha defendido hoy la unificación de áreas sanitarias y espera que el decreto esté antes de final de año tras pasar todos los trámites y una vez analizadas las alegaciones, que en general no percibe que haya alguna "realmente fundamentada".

En declaraciones a los medios, Oliván ha remarcado que esta medida es buena "en sí misma" y no entiende la polémica que ha suscitado, ya que ni penaliza la asistencia, ni tiene connotación negativa respecto a la dispersión territorial de Aragón "ni evidentemente ataca a derechos históricos de nadie".

Es, ha dicho, una medida en sí misma buena desde el punto de vista de la gestión, que racionaliza y busca la eficiencia, y a medio plazo "los ciudadanos percibirán ventajas".

El objetivo último que persigue, ha agregado, es intentar que a todos los pacientes aragoneses se les atienda igual "estén donde estén" y con esta medida "se va en esa línea".

Ha precisado, respecto a su puesta en marcha, que se deben responder las alegaciones presentadas en el periodo de información pública, que acabó el 31 de agosto, evaluar si tiene en cuenta alguna y pasar todo el proceso consultivo para su aprobación final por el Consejo de Gobierno, si bien espera que antes de final de año esté publicado en el Boletín Oficial de Aragón.

En cuanto a la unificación de las unidades de salud mental, ha indicado que está pendiente una pequeña obra en el centro de San José, y una vez esté concluida se pondrá en marcha el programa lo más rápido posible.

Oliván ha hecho estas declaraciones en una visita a las instalaciones que Aspace tiene en Zaragoza junto a la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi.