Podemos negociará los presupuestos de 2017 cuando el gobierno publique en el BOA las modificaciones legales necesarias para desbloquear la construcción de las infraestructuras educativas y sanitarias pendientes y siempre que el interlocutor no sea el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno.

Estas dos condiciones fueron ya acordadas el pasado viernes por el Consejo Ciudadano de Podemos Aragón y hoy el líder de la formación morada en la Comunidad, Pablo Echenique, ha comparecido ante los medios para ratificar que su parido se sentará a hablar con el PSOE de la toma en consideración de las cuentas de este año siempre después de que se cumplan estas dos condiciones.

Ha reconocido que esto supone un "cambio de postura" de Podemos, que Echenique ha achacado a la "línea roja" que ha cruzado el Gobierno de Aragón al "tomar como rehenes" a los aragoneses en una grave "innovación de su estrategia negociadora", que ha obligado a la formación morada a tomar la decisión de sentarse con "condiciones".

En este sentido, Echenique ha considerado que el ejecutivo no tiene "voluntad política" de negociar porque piensa que la prórroga le beneficia al permitir a Gimeno ser "el mejor alumno" del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y acometer cada mes en el que no hay presupuestos "recortes encubiertos".

La prórroga, "atípicamente restrictiva" según el diputado Héctor Vicente, afecta directamente a los aragoneses, pero en lugar de escudarse en "aspectos técnicos" tiene vías legales para cambiar las cosas, como emitir una orden menos restrictiva o hacer una interpretación de la misma que considere "servicios fundamentales" la construcción de estos colegios