La asociación Quiero aprender en mi barrio, en Huesca, protestó ayer contra los recortes y las decisiones de la consejería de Educación del Gobierno de Aragón a las puertas del colegio San Vicente, donde la Junta de Personal Docente del centro acompañó a los padres. El colectivo se concentró poco después en la plaza Cervantes para reivindicar la reapertura de la tercera vía en los colegios públicos Pedro J. Rubio y Pirineos Pyreneès, donde la falta de plazas obligó a 41 niños a ser escolarizados en centros externos a sus barrios.