Los robos con violencia e intimidación se redujeron un 20% en el último timestre del año con respecto año anterior. En este periodo fueron detenidas 56 personas.

Un descenso que desde la Jefatura Superior de Policía de Aragón relacionan con la creación de un grupo policial especializado que investigue estos asuntos, unida al incremento de las vigilancias por parte de la Brigada de Seguridad Ciudadana y por Extranjería y Fronteras que procedió a la expulsión de 28 inmigrantes que sumaban 116 detenciones. Entre ellos había autores de la práctica marcial conocida como mataleón.

Desde la Jefatura Superior de Policía de Aragón añaden otra clave para el aumento de los arrestos: una potenciación del servicio de vigilancia con motivo de la Navidad. «Ha habido especial atención a las zonas de ocio de Zaragoza, dado que los autores de estos hechos aprovechan que las víctimas salen de bares y locales de copas donde han estado celebrando estas fiestas para, aprovechándose de la merma de facultades, cometer los robos».

El 5 de enero del año pasado marcó un antes y un después cuando una persona denunciaba que había sido víctima de un asalto en el que había quedado inconsciente sobre el suelo de la calle. Le habían hecho un mataleón. Una práctica marcial que llegó a extenderse hasta el punto de que supuso el 10% de los casos de robos con violencia ocurridos en la capital aragonesa.

El perfil del delincuente que realiza este método de asfixia en Zaragoza es, según el Grupo de Robos con Violencia de la Jefatura Superior de Policía de Aragón, joven, de entre 20 y 30 años, extranjero -siendo el 80% de origen magrebí- y ha tenido antecedentes policiales cuando eran menores y durante la edad adulta, no tienen otra forma de vida. Actúan siempre en grupos de dos o tres personas y, especialmente, de madrugada.

El objetivo es, en la mayoría de ocasiones, hombres jóvenes y, a ser posible, que estén bajo los efectos del alcohol de cara a evitar episodios de resistencia. Es por ello que sus zonas de actuación son siempre los alrededores de las discotecas. Les roban el teléfono móvil y la cartera por si llevan algo de dinero.A pesar de estos datos, desde la Policía Nacional se pide a la ciudadanía no bajar la guardia y denunciar siempre.

Desde la puesta en marcha de este grupo policial en febrero, los agentes han analizado más de de medio millar de denuncias de las que descubrieron que el 10% de las mismas eran falsas para cobrar el seguro. Esas personas también fueron detenidas.