El perfil habitual de la ciudad de Monzón se verá modificado a ojos vista. Tal y como lo anunció ayer el equipo de gobierno municipal, compuesto por el PSOE y Cambiar Monzón, será preciso trasladar la estatua del Sagrado Corazón que preside el castillo templario para seguir adelante con las obras de tratamiento de las aguas pluviales, según anunció ayer Radio Huesca.

La imagen, colocada en el emplazamiento actual en el año 1950, a raíz de una donación de la empresa Hidro Nitro Española, no guarda relación directa con la estampa medieval del castillo, pero se ha convertido en un elemento caracterizador de la capital del Cinca Medio.

Su traslado es necesario para poder realizar tareas imprescindibles con el fin de impermeabilizar la fortaleza e impedir los derrumbes de tramos de su muro, como ha ocurrido últimamente.

La idea del Ayuntamiento de Monzón es retirar la imagen, restaurarla y volver a colocarla en otro lugar, acorde con sus características y significado religioso. La Iglesia asume que el asunto es competencia del consistorio y la entidad donante y el equipo de gobierno se compromete a realizar la operación de traslado y posterior recolocación con el máximo respeto. En este sentido, el alcalde, Álvaro Burrell, ha dado garantías de que el cambio de ubicación se hará con sumo cuidado.