No es que el sol cruzara de este a oeste Aragón, que de todo hubo, pero el viernes fue el primer día de la semana que se vio la luz, que se respiró cierta normalidad en las carreteras y municipios de la comunidad, sobre todo en las zonas que han sido azotadas por Gloria con mayor furia. Por fin, el Gobierno aragonés pudo anunciar que ningún municipio de la localidad está aislado. Se acabó el temor a las enfermedades donde no hay médico, se terminó la falta de suministros y el lunes vuelve el colegio para todos los escolares, aunque queda trabajo por hacer, que empezará por la evaluación de daños que se hará este mismo fin de semana. Esta tarde llega el presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez sobre las 16.30 horas en Cantavieja -por la mañana irá el presidente del PP aragonés, Luis María Beamonte-, para constatar junto al presidente aragonés, Javier Lambán, las consecuencias.

El jefe del Ejecutivo evaluará, de primera mano, los daños provocados por Gloria, y Lambán ya señaló ayer que le trasladará la necesidad de que implemente ayudas ante estas situaciones de emergencia «para Aragón igual que para el resto de las comunidades».

La situación dio el último giro este viernes, cuando quedó abierta al menos una vía de comunicación para todos los municipios incomunicados. Queda el trabajo para mejorar las arterias principales, ensanchando la parte limpia para mejorar la circulación, además de actuar en la limpieza de vías secundarias, que en muchos casos son pistas que unen municipios y permiten el acceso a granjas y masías del sur aragonés.

En la provincia de Zaragoza se recuperó el suministro eléctrico por completo pero en Teruel todavía quedan 138 clientes afectados. Eso sí, hay luz ya en todos los municipios, por lo que los damnificados que quedan corresponden a masías y construcciones aisladas, normalmente alejadas de los núcleos urbanos. En cuanto al teléfono tan solo quedaban 24 abonados sin línea en todo Aragón.

Con todos los datos, el Gobierno aragonés rebajó a nivel 1 la emergencia del Plan Territorial de Protección Civil a las dos de la tarde tras comprobar la habilitación del acceso a todos los núcleos urbanos de las zonas afectadas. Este nivel se alcanza cuando la situación generada o la evolución previsible puede ser controlada con los medios y recursos asignados, lo que supone la retirada de los medios desplegados por la Unidad Militar de Emergencias (UME).

En lo que se refiere a carreteras, quedan tramos cortados correspondientes al puerto de Fonfría, y las carreteras A-2403 (Camarillas-Ejulve) y A-2705 (Alcalá de la Selva-Linares). Y en el Bajo Aragón y Matarraña se trabaja en la limpieza de las vías en las que se han producido desprendimientos, mientras en Zaragoza se realizan trabajos de refuerzo en aquellas arterias en las que se abrió paso a través de un único carril.