Agentes de la Policía Nacional de la Jefatura Superior de Policía de Aragón detuvieron este fin de semana en apenas cinco horas a siete varones, uno de ellos menor de edad, como presuntos responsables de un delito de desobediencia grave, por incumplir de forma clara y reiterada la normativa estipulada en el Real Decreto del estado de alarma. El viernes por la noche se detuvo a cinco personas y el sábado de madrugada a otras dos, constándoles a todos ellos varios antecedentes y varias propuestas de sanción económica.

En primer lugar, el viernes 1 de mayo, sobre las 20.45 horas, un vehículo patrulla de la Policía Nacional que realizaba labores de prevención de la delincuencia por la calle Ramón Pignatelli de Zaragoza observó a un grupo de cuatro jóvenes reunidos sin cumplir las medidas de distanciamiento. Los agentes les informaron varias veces de la normativa en vigor, pero ellos se negaron a abandonar el lugar, por lo que fueron detenidos por desobediencia grave.

M.M. de 45 años, K.K. de 27 años, C.A. de 34 años y M.A. de 30 años, a los que les constan varios antecedentes, ya habían sido propuestos para sanción por incumplir las medidas del estado de alarma hasta en seis ocasiones cada uno.

El mismo día, sobre las 23.00 horas, mientras un indicativo de la Policía Nacional se encontraba en una intervención en la calle Pedro de Luna se percataron de que habían un varón observándoles fijamente. Una vez finalizada dicha intervención, los agentes le preguntaron el motivo por el que estaba en la calle, a lo que el hombre les contestó "que era muy cotilla y que hacía lo que le viene en gana".

Consultadas las bases de datos policiales, M.K.A.A. de 19 años de edad y con varios antecedentes, había sido propuesto para sanción durante el estado de alarma hasta en seis ocasiones, por lo que se procedió a su detención por desobediencia grave.

Finalmente, el sábado 2 de mayo, sobre las 01.30 horas, agentes de la Policía Nacional observaron en la calle Cereros a dos jóvenes que ante la presencia policial echaron a correr. Una vez interceptados, dieron versiones contradictorias sobre el motivo por el que se encontraban a esa hora en la vía pública, manifestando que venían de comprar tabaco, si bien presentaron un ticket de compra de patatas fritas y bebida en un establecimiento muy lejano, situado en la calle Rioja.

Aun así, los agentes les manifestaron la normativa en vigor y la obligación de ir a su domicilio salvo por una causa justificada y los dejaron irse. Minutos más tarde, los policías, volvieron a encontrar a estos dos jóvenes en la Plaza Santo Domingo en dirección opuesta a su domicilio, situado en la calle Mariano Cerezo.

Por ello, los agentes los detuvieron por desobediencia grave. Uno de ellos era un menor de edad, mientras que el otro era Y.B. de 19 años, con varios antecedentes y dos propuestas de sanción por incumplir las medidas del estado de alarma. El detenido menor de edad fue llevado con su madre y se dio cuenta de los hechos a Fiscalía de Menores y al Grupo de Menores de la Jefatura Superior de Policía de Aragón.

Por su parte, todos los detenidos mayores de edad fueron puestos a disposición judicial.