La Asociación de Tropa y Marinería Española (ATME), que representa a más de 7.000 soldados, más de 500 en Aragón, ha decidido dar un giro en su estrategia y plantear sus reivindicaciones directamente a los grupos políticos del Congreso, ante la "ineficacia" que, sostienen, muestra el Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas (Coperfas), constituido el pasado 6 de marzo. En los últimos años se han ido permitiendo las asociaciones por escalas, representadas en este órgano en la misma proporción que el Ministerio de Defensa. Pero las peticiones de los soldados son sistemáticamente rechazadas.

"Es un sistema nuevo, pero el ejército profesional solo lleva constituido desde el año 2.000 y todos nos estamos adaptando", indicaron fuentes de ATME en Aragón, que no quieren plantear la reivindicación como un conflicto con los mandos.

Pero sus peticiones en estos meses han venido documentadas en múltiples informes --28 en la comunidad--, laboriosos en su elaboración, pero que no han llegado ni a debatirse. La comisión preparatoria que decide qué temas se tratan en el Coperfas los rechaza por uno u otro motivo. Por ello, en su última asamblea, más de 7.000, optaron por buscar nuevas vías.

Estas son compartidas por otras agrupaciones como la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME), que anteayer se manifestó en Madrid contra el régimen disciplinario recién aprobado y contra la ley de carrera militar, en la que la tropa quiere estar englobada. Según explicaron desde ATME, esta solo afecta a oficiales y suboficiales y coarta así las posibilidades de prosperar dentro del ejército profesional.