El área de Servicios Públicos y Personal ha ido perdiendo fuerza conforme ha avanzado la legislatura. Ya no solo porque el alcalde le arrebató a su concejal, Alberto Cubero, la gestión de Parques y Jardines, sino porque las acciones que se han llevado a cabo han tenido un protagonismo excesivo teniendo en cuenta su resultado. La municipalización ha estado siempre en el punto de mira y en el centro del debate. Por mucho que el Gobierno de ZeC venda la internalización de este servicio de atención telefónica como un éxito, el futuro de las 14 empleadas sigue en el aire y eso, más que un éxito, es un fracaso. Nada se sabe ya de los Puntos Limpios que Cubero quería municipalizar, ni de las depuradoras, por más que el concejal anuncie que lo va a hacer porque, por ahora, no ha pasado de las palabras. En Personal la gestión del concejal ha sido agridulce porque ha sacado a Oferta Pública de Empleo (OPE) todas las plazas posibles pero Cubero no ha conseguido encontrar ese feeling con los funcionarios tan necesario. Lo que sí ha logrado impulsar ha sido el reciclaje de la materia orgánica, un proyecto que tendría que haber llegado hace años a la ciudad. c. g. s.