Un vecino del barrio de La Paz intentó matar ayer a su pareja, contra la que efectuó un disparo con una escopeta de caza en el domicilio familiar. Los hechos ocurrieron a las dos de la madrugada en un inmueble de la calle Medina Albaida y el proyectil erró el tiro e impactó en el marco de una puerta.

El agresor, Alfredo N. N., de 52 años y que fue detenido por la Policía, ya había protagonizado horas antes otro incidente, al utilizar la misma escopeta para retener en la vivienda contra su voluntad a su hija de 25 años, a la que abofeteó e insultó, y a su novio.

En esta ocasión, efectivos de la Policía Local se desplazaron al lugar, facilitando el abandono del piso de los dos retenidos. No se procedió a su arresto porque la joven no presentó denuncia, aunque se informó del incidente a la autoridad judicial.

Este suceso se produjo a las 21.30 horas del miércoles. Posteriormente se produjo una pelea con su compañera sentimental, una mujer de 45 años y nacionalidad ecuatoriana, a la que agredió físicamente, según informaron fuentes policiales.

La víctima se refugió en el baño para no recibir más golpes, pero el agresor le amenazó con "pegarle un tiro" si no salía. Cuando la mujer dejó su refugio, Alfredo N. le disparó un tiro desde el dormitorio principal de la casa.

DETENCION La Policía, alertada por los vecinos, detuvo al agresor, en estado de gran nerviosismo, e intervino una escopeta de repetición de la marca Franchi, calibre 12 milímetros. El sospechoso ya había sido arrestado el pasado día 16 por amenazas y resistencia a los agentes de la autoridad.

Fuentes vecinales, que no quisieron ser identificadas por temor a represalias, señalaron que los incidentes con el detenido se han repetido desde hace varios años. "Empezó a sufrir depresiones por problemas con el trabajo. Se dedicaba al montaje de tabiques y ahora está prejubilado por sus problemas psíquicos. Los vecinos llevamos mucho tiempo recibiendo insultos y amenazas. Estos tenía que pasar algún día y aún pueden ocurrir cosas peores si alguien no pone remedio", explicó una mujer.

Alfredo N. es natural de Gallur y se traslado a vivir a Zaragoza hace 27 años, al mismo piso que ahora ocupa. Hace cuatro años se separó de su mujer, al parecer por los incidentes violentos que protagonizaba.

"Desde hace algún tiempo convivía con su actual compañera, pero esta mañana la hemos visto que tomaba un taxi con varios bultos. No creo que vuelva después de lo que ha pasado. Su hija le venía a visitar con su novio, pero ayer escuchamos como les insultaba", señaló un vecino.

Su compañera manifestó a los policías que ya había recibido malos tratos psíquicos y físicos con anterioridad, que no llegó a denunciar, y que el agresor estaba nervioso y depresivo por problemas económicos. Los vecinos explicaron a este periódico que, además de estar en tratamiento y medicado, solía consumir alcohol y que jugaba mucho a las máquinas tragaperras, lo que originaba estos problemas de dinero.