Poco democrático, injusto, una ofensa a las urnas en Miralbueno. Así definieron ayer el cese del alcalde José Luis Castillo medio centenar de vecinos reunidos como representantes de ocho entidades vecinales, sociales y educativas del barrio y como personas a título personal. Sentaron aparte posibles diferencias sobre la escuela infantil y se mostraron unánimes en el rechazo a "las formas" de actuar del Ayuntamiento de Zaragoza al cesar al alcalde y al vocal Gregorio Herrera. Además, reclaman firmemente la convocatoria de elecciones en el plazo de un mes, como establece el reglamento de Participación Ciudadana.

En la reunión estuvieron representados la Asociación de Vecinos de Miralbueno, la Asociación de Mujeres, la Asociación de Padres del colegio Julián Nieto y la dirección del centro, el APA del instituto de secundaria de Miralbueno, la Asociación Deportes de Miralbueno, la Agrupación Musical y la Agrupación Socialista de Miralbueno.

El sentir vecinal combinaba por igual estupefacción ante la rapidez de los acontecimientos y la magnitud (dos cargos políticos cesados), indignación por las destituciones, recelo hacia posibles consecuencias (muchos temían ayer que que el cese esté relacionado con una transformación del barrio rural en distrito urbano) y voluntad de movilizarse. Por eso, elaborarán un escrito de protesta al que invitan a firmar a todo el que lo desee y que enviaran al consistorio. Además, se concentrarán este viernes en Miralbueno para mostrar el rechazo.

Por otra parte, las reacciones políticas continuan. Si el fin de semana IU exigió a Belloch que revoque la destitución de Castillo, ayer PP y PAR reclamaron la comparecencia de Becerril para dar explicaciones. Este comparece hoy en la comisión de Participación Ciudadana.