El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha nombrado a Patricia Cavero (PP) concejala delegada para las víctimas del terrorismo. Hasta ahora, Cavero ostentaba el cargo de responsable del área de Infraestructuras, Vivienda y Medio Ambiente, además de ser también la concejala delegada de la Policía Local. Con este nombramiento, la conservadora gana peso en el ejecutivo, aunque su nuevo papel será más simbólico que técnico.

Según un comunicado difundido por el ayuntamiento de la capital aragonesa, Cavero tendrá la responsabilidad de dirigir «la gestión de las actuaciones municipales destinadas al reconocimiento y apoyo a las víctimas del terrorismo, así como la interlocución y colaboración con las entidades y asociaciones que la representan».

Desde el Gobierno de PP y Cs, asimismo, anuncian que Zaragoza es la primera gran ciudad de España en contar con una concejalía dedicada en exclusiva a atender a este colectivo. Azcón nombró a Cavero el pasado 5 de junio mediante un decreto en el que se recordaba que la Ley 29/2011, de Reconocimiento y Protección Integral a las Víctimas del Terrorismo, fue «aprobada por unanimidad como expresión del reconocimiento y compromiso permanente de la sociedad española» y que establecía «que los poderes públicos impulsarán medidas activas para asegurar el recuerdo y el reconocimiento de las víctimas».

El nombramiento de Cavero, además, cobra sentido atendiendo al pasado de la concejala popular. En la oposición fue ella quien reclamó en nombre del PP al Gobierno de Zaragoza en Común la reparación del memorial a las víctimas del terrorismo situado junto a la iglesia de San Juan de los Panetes.

Según la nota del Ejecutivo de la ciudad, el consistorio «ha reiterado en numerosos acuerdos plenarios su compromiso y apoyo con todas las víctimas del terrorismo, habiéndose instado al Gobierno de Zaragoza para apoyar y liderar cuantas acciones se promuevan en la ciudad en homenaje y recuerdo de las víctimas». El objetivo, según el equipo de Gobierno, es recordar a los que sufrieron «la barbarie terrorista» y promocionar la «libertad» y los «derechos humanos».