Ni al penúltimo le consiguió ganar el Real Zaragoza, que sigue en barrena, en caída libre y viendo cómo pasan las jornadas sin una reacción. Con Lucas Alcaraz el equipo aragonés ha logrado 5 puntos de 21. Números de descenso, aunque el técnico mantiene la fe en que se va a mejorar. Fue muy claro cuando se le preguntó si se planteaba la dimisión: «Para nada». La situación es mala, pero es «un profesional del fútbol» y antes de llegar al club estaba «en mi casa viendo la tele». Tiene fuerzas para lograrlo porque «quedan muchas jornadas y no tengo la más mínima duda de que vamos a sacar esto adelante».

Sobre el desarrollo del partido en sí, el preparador granadino afirmó que «el equipo estuvo más intenso y compacto», lo que le permitió estar «cerca de adelantarse en varias fases, que hubiera sido clave». Sin embargo lamentó que «en los últimos diez minutos no hemos ganado ningún duelo individual y, en los metros finales, siempre hemos tomado malas decisiones, centrado o definido mal».

El equipo, añadió, «merodea muchísimo el área rival», pero no se logra concretar. Así no llegan los goles ni las victorias. Para ello, «tenemos que estar fuertes y con convencimiento de seguir creciendo y sumando», porque «está claro que nos está costando mucho».

Portería a cero / Pocas lecturas positivas deja un pobre empate ante un rival en descenso como el Córdoba, pero al menos Alcaraz no tuvo «la sensación de que el equipo estuviera bloqueado como en la segunda parte ante el Cádiz o la primera contra el Granada». De hecho, «en intensidad y convencimiento lo he visto mejor que en esos momentos».

Sobre el cambio de sistema y su incidencia en la defensa, el técnico zaragocista incidió en que no cree «que se defienda mejor por tener tres centrales o cuatro defensas», ya que «se elige una formación en función de más cosas». De todos modos, «hemos mantenido la portería a cero» por primera vez desde su llegada, aunque reconoció que es «un momento en el que es difícil sacar algo positivo». Por último, sobre que se ahorrase un cambio, Alcaraz dijo que las sustituciones se hacen «para cambiar el signo del partido» y que los centrocampistas y defensas, «estaban bien», así que optó por cambiar a Gual por cansancio.