Ya está aquí de nuevo la Vuelta Aragón, por 44ª vez. Después de más de una década de ausencia retornó el pasado año con una exitosa cita y en esta segunda edición busca seguir creciendo y consolidándose en el calendario. A las 12.05 comenzarán tres días de pasión por el ciclismo en la comunidad con la salida neutralizada desde la localidad turolense de Andorra y, diez minutos después, siempre y cuando el cierzo lo permita y no se arranque 15 minutos antes, los corredores comenzarán su andadura hacia Calatayud, meta de la primera etapa, tras 186,2 kilómetros de recorrido por el sur de Aragón.

Se trata de una prueba muy abierta, con menos alta montaña que en la temporada de su regreso, con dos previsibles llegadas al esprint tanto hoy como el domingo y con una etapa intermedia de media montaña en la que los escaladores deberán apretar para conseguir el triunfo final de la clasificación general. Las bonificaciones, tanto en las líneas de meta como en los pasos intermedios, también pueden ser decisivas para decidir el ganador final que recoja el testigo de Jaime Rosón, que sigue figurando como vencedor a pesar de estar suspendido por anomalías en su pasaporte biológico en su etapa en el Caja Rural, antes de ser corredor del Movistar.

CUATRO ARAGONESES

Tras la etapa de hoy, en la que se espera que haya escapadas y llegada al esprint a la localidad bilbitana, la carrera pondrá rumbo a Sádaba para partir hacia el Pirineo. Hasta la meta, situada en Canfranc Estación, un lugar cargado de simbología, reivindicación y belleza, los ciclistas deberán superar 186 kilómetros y cuatro puertos de montaña: Santa Bárbara (3ª), San Juan de Peña (2ª), Oroel (2ª) y Somport (3ª). El de San Juan de la Peña, aunque está lejos de meta (se coronará a 51 kilómetros del final), es el punto clave marcado por los equipos por la gran probabilidad de que el pelotón se corte y se reduzca el número de posibles ganadores de la general.

De todos modos, el hecho de que a la vez se esté disputando el Giro de Italia, una de las tres grandes citas del calendario de la temporada, y el Tour de California, propicia que la Vuelta Aragón reúna en su mayoría a equipos UCI Continental y UCI Profesional Continental, pero sí que repetirá, como único representante UCI World Tour el equipo Movistar. No hay un cartel de lujo ni lleno de grandes nombres.

El conjunto español tratará de llevarse el triunfo por delante de escuadras dispuestas a ponérselo difícil como el Caja Rural, el Euskadi Murias o el Androni Giocatoli italiano. Marc Soler, una de las mayores promesas españolas, regresa a la competición en Aragón tras su fractura de escafoides y será uno de los grandes favoritos para lograr el triunfo final a pesar de ser sexto el año pasado.

En cuanto a los aragoneses, poco a poco van creciendo, adquiriendo experiencia y mejorando. Tanto Jorge Arcas como Jaime Castrillo llegan en un buen momento de forma, aunque posiblemente se dediquen a ser gregarios de Soler, el principal puntal del Movistar. El serrablés está dispuesto a ayudar al equipo y mejorando a pesar de que el recorrido no se adapte del todo a sus características. Por su parte, Castrillo cuajó un gran Tour de Romandía y es un corredor que se adapta bien a todos los terrenos, por lo que será fundamental de cara a la clasificación general.

En el Euskadi Murias, un equipo muy equilibrado y bien estructurado, se encuentran Fernando Barceló y Sergio Samitier. El primero llega también en un buen momento de forma, pero la falta de alta montaña no le beneficia. A pesar de ello, plantará cara en la etapa pirenaica de mañana. Por su parte, el ciclista natural de Barbastro viene de ganar la clasificación de la montaña del Tour de los Alpes y de hacer buenas vueltas a Andalucía y Comunidad Valenciana, por lo que también tendrá sus opciones en la carrera de casa. Así, se antojan tres días llenos de ciclismo por las tierras de la comunidad.