César Láinez fue la novedad positiva en el regreso al trabajo zaragocista. Completó la sesión de entrenamiento con sus compañeros --primero con los porteros y después con todos-- con total normalidad y pudo golpear el balón sin las molestias que sufría la semana pasada en el abductor derecho, por lo que su presencia ante el Racing de Santander es segura. El propio Láinez confirmó que ya no siente dolor en esa zona y, de este modo, regresará a la portería zaragocista después de no poder jugar en Balaídos.