La trayectoria de David Huertas como triatleta es peculiar. Se inició en la modalidad a los 20 años. Aún recuerda sus comienzos con el Cierzo. «Fue el Campeonato de Aragón de triatlón sprint en Teruel. Salí el primero del agua y perdí puestos en la bici. En la carrera a pie llevaba unas zapatillas normalitas que llevaban un velcro y se despegaban», recuerda el zaragozano.

Así como la gran mayoría comenzó en el triatlón en distancias cortas, Huertas prefirió competir sobre largas. «Hice medios ironmanes y el ironman de Vitoria. Son 3.800 metros de natación, 180 de bicicleta y el final con el maratón», indica el zaragozano, que no tiene como objetivo Hawai. «Ahora ni me lo planteo. Lo haré en muchos años y si puedo, hacer un tiempazo bajando de las nueve horas», dice convencido.

Huertas llegaba a la especialidad tras haber sido uno de los mejores nadadores aragoneses de su generación. «Empecé a nadar en el San Gregorio a los cinco años. Mis mejores años los pasé en el Polideportivo San Agustín. Mi entrenador era Mariano Herranz y llegué a estar en el Centro de Alto Rendimiento de la Federación Aragonesa de Natación». Huertas era un especialista de crol hasta los 1.500 metros. «Lo más destacado fue el puesto de finalista en los 400 estilos del Nacional júnior. Tenía 16 años», indica. Pero después dejó la natación y se dedicó a estudiar. «No podía compatibilizar Administración y Dirección de Empresas con el deporte. Estoy convencidísimo de que si hubiera seguido entrenando habría llegado más alto porque con 28 años estoy haciendo mis mejores marcas».

EL TRABAJO DE AZAFATO

A la vez que estudiaba, Huertas trabajaba en tiendas de ropas y era azafato. Una vez que se dedicó de lleno al triatlón, fue subiendo de nivel y ahora está entre los mejores de Aragón. Lucha por los primeros puestos con Fernando Zorrilla. «El nivel en Aragón ha subido mucho en los últimos años. Zorrilla es mi mayor rival, pero también lo están haciendo muy bien Daniel Tolosa y Roberto Gibson. En el Campeonato de España por relevos hicieron el relevo mixto Zorrilla y Gibson», indica.

En los últimos años ha copado los primeros puestos en los Regionales. «He ganado tres años seguidos el Campeonato de Aragón en distancia olímpica y dos el de sprint. El pasado fin de semana no pude ganar el olímpico en Tarazona. No pude correr con mi bici y esto me condicionó», indica. Su punto fuerte en el triatlón es la natación. «Este año más todavía. Estoy saliendo muy adelante. Además he ganado seis travesías en aguas abiertas a nivel nacional en Peñíscola, Zarautz, Oropesa, Benidorm, Denia y Bañolas». Ayer ganó en Campello. En los últimos años ha mejorado mucho sobre la bici. Su talón de Aquiles es la carrera a pie. «Antes no me gustaba nada correr, pero ahora le estoy cogiendo el gusanillo. Lo que pasa es que hace un año cogí una anemia muy gorda y me dejó muy mermado».

Hace dos años tomó una decisión muy importante. Se fue a Madrid para volcarse más todavía con el triatlón. Se entrena con el Team Clavería. «Me fui porque quería saber hasta dónde podía llegar en el triatlón. Vivo con mi abuela Pepita. Soy del Diablillos de Rivas y entrenamos un grupo de siete chicos y tres chicas en Brunete. Nos prepara Ricardo Clavería», dice el zaragozano.

Huertas es consciente que nunca será una estrella como Javier Gómez Noya, Fernando Alarza o Mario Mola. Pero le mueve la ilusión por llegar los más arriba posible en el panorama nacional. «Mi objetivo es estar en el top 20 del Campeonato de España élite en la distancia sprint u olímpica». La cita es el próximo 29 de septiembre en La Coruña.