Se pueden tener en mente las magníficas instalaciones del Athletic en Lezama, de Osasuna en Tajonar o las del Villarreal, la proliferación de campos de césped artificial para entrenar o la nueva Ciudad Deportiva que estrenará el Barcelona, pero todo eso, que corresponde a equipos tan de Primera como el Zaragoza, no tiene nada que ver con las instalaciones del conjunto aragonés junto a la Nacional 330. Es más apropiado compararlo con una ciudad deportiva fantasma, ya que no tiene en estos momentos ningún campo totalmente apropiado para trabajar en las mejores condiciones. Y no sólo al nivel exigible en la élite.

Ese lamentable estado de los terrenos de juego --que ha sido es criticado por los técnicos que allí entrenan-- contrasta con las tesis estéticas sobre el fútbol que tienen algunos dirigentes del club aragonés, porque una premisa básica para jugar bien al fútbol es tener un lugar adecuado. En un patatal , ni Ronaldo sería capaz de hacerlo.

Ese es el mejor adjetivo para definir algunos de los campos --ver gráfico-- que hay, como el número 1, el 3 --ambos situados en la zona de arriba-- y el 7. Ninguno de los tres tiene las medidas exactas y nadie debería ejercitarse en tan infames escenarios por el gran peligro de lesiones, pero si bien el 3 no se utiliza, los otros dos han sido usados por futbolistas juveniles, cadetes e infantiles.

Tampoco tiene la dimensión correcta el 5, ubicado junto a los vestuarios y, curiosamente, es el que mejor está, pero ahí el primer equipo no puede hacer fútbol, ni ensayar jugadas, ni hasta trabajar ciertas dinámicas con 26 futbolistas. Por eso, el mayor volumen de trabajo del Zaragoza se realiza en el campo 4, donde además juega el filial. Tiene desniveles, hoyos y es peligroso. Que le pregunten a Savio.

Quedan otros dos campos reglamentarios. El 2, ubicado arriba y utilizado por el filial para entrenarse y para partidos de categorías inferiores tiene una apariencia exterior buena, pero es una caja de bombas , con muchos agujeros. Y resta el 6, donde a veces realiza trabajo físico el Zaragoza y juegan infantiles y cadetes, pero también está en malas condiciones.