La FIFA tuvo que salir al paso ayer de las quejas de la delegación costarricense, que consideró abusivo que siete de sus futbolistas fueran sometidos a un control antidopaje tras la victoria ante Italia, mientras sus rivales solo pasaron dos, los habituales. La FIFA aclaró que los análisis formaban parte de los controles pre Mundial, que no habían pasado los costarricenses.