En medio del debate entre si Bale debe ser titular en detrimento de Isco en la final de la Liga de Campeones del sábado ante la Juventus, Cristiano Ronaldo irrumpió para dar un golpe encima de la mesa y terminar con esa cordura que suele presidir las manifestaciones previas a una final y, de paso, cargarse el mensaje de respeto de Zinedine Zidane. «Demasiada humildad no es buena. Somos mejor equipo que la Juventus», declaró el astro portugués en el día de puertas abiertas que la UEFA obliga a llevar a cabo a los finalistas de la Champions.

Si alguien podía poner una nota discordante o una manifestación alejada de la cautela, ese es Cristiano Ronaldo. El jugador portugués se desmarcó del mensaje de máximo respeto de Zidane a la Juve. «Se trata de un gran equipo y no hay favorito. En octavos no quería que nos tocara en el sorteo. Ahora no puedo elegir. Ni ellos tienen mejor defensa que nosotros ni nosotros tenemos mejor ataque ellos. Dybala es de lo mejor ofensivamente y también Higuaín y Alves», declaró el técnico francés. Tampoco se quedó atrás Toni Kroos, que tildó al conjunto de Massimiliano Allegri de «equipazo».

En medio de tantos halagos, Cristiano decidió que eso de la humildad está muy visto. El portugués ninguneó a un equipo que acaba de lograr Liga y Copa en el que ya es el tercer doblete de Allegri, que disputará su novena final de Champions y que tiene dos trofeos de la máxima competición europea. La Juventus llega a la final de Cardiff como en el equipo menos goleado, con tres tantos, dos de ellos encajados en jugadas a balón parado. Ninguna de esos argumentos merecen un gran respeto por parte de Ronaldo hacia un rival que busca el triplete y amenaza seriamente la posibilidad de que el Madrid consiga su tercer título en cuatro años.

KROOS HUYE DEL 4-3-3 / «Humildad es una palabra muy amplia. Tenemos que demostrar nuestro carácter y que somos el mejor equipo», dijo Cristiano, que después de escuchar sus palabras intentó dar marcha atrás al asegurar que la Juventus «también es un buen equipo».

Mucho más elegante estuvo Zidane, que vio cómo la rueda de prensa previa al entrenamiento se centraba en los nombres de Bale e Isco, es decir en la vuelta de la BBC y ese 4-3-3 del que Kross no quiso ni hablar: «Tengo mi opinión, pero me la reservo». Tampoco la manifestó Zidane, que vivirá su segunda final consecutiva con su equipo, y que se verá obligado a decantarse entre el galés, que apenas lleva una semana ejercitándose tras volver a caer lesionado en el último clásico, o el malagueño, decisivo en el tramo final de la temporada. «Es normal que haya debate, pero a mí no me va a condicionar. Bale no me tiene que decir que quiere jugar. Sé que juega en su casa, pero también los demás tienen la suficiente motivación», declaró Zidane. Poco después, Bale quitó presión a su entrenador y aseguró que si es suplente lo entenderá. «Me encuentro muy bien, estoy totalmente recuperado y listo para volver. He trabajado muy duro, con dos sesiones al día durante muchos días para llegar al máximo. Me siento bien», dijo.

LAS PALABRAS DE BALE / «Estaría decepcionado si no pudiese jugar una final tan especial por lesión, pero he llegado a tiempo para el partido y voy a disfrutar si juego de titular o si me quedo en el banquillo. Entenderé lo que pase y lo importante es el equipo y ganar una nueva final», añadió. El jugador, galés y natural de Cardiff, sede de la gran final, no oculta la emoción que siente por jugar una final en su ciudad natal: «Es una ocasión magnífica, una final donde nací. Solo falta un paso más que es ganar la Champions de nuevo y hacer historia».

«He tenido problemas con las lesiones este año --relató--. Especialmente dura fue la del tobillo, pero ya han pasado meses y superé los problemas. Ahora he trabajado de nuevo duro para poder llegar a la final y estoy disponible para el entrenador. Me siento bien entrenando con mis compañeros», explicó. Sobre Isco, el galés destacó: «Ha jugado de manera increíble este tiempo. A nosotros nos da igual quién juegue de titular porque lo más importante es el equipo. Haga lo que haga Zidane, lo entenderé».