La victoria del pasado lunes en Tarragona no hizo sino evitar males mayores. El triunfo del Zaragoza ante el Nástic sirvió para acabar con una racha nefasta y para huir de los puestos de descenso a Segunda B, pero el valor de aquel logro quedará seriamente minimizado en caso de que carezca de continuidad. Porque tan delicado es el estado del conjunto aragonés que todavía anda lejos de pasar a planta. El tratamiento para ello es claro: victorias. Ha perdido tanto terreno que le queda demasiado camino por andar todavía.
Así que ganar al Mallorca es fundamental para recuperar la confianza en un Zaragoza que no gana en casa desde hace tres meses. Casi nada. Demasiado lejos queda aquella tarde de agosto, cuando el equipo entonces dirigido por Imanol Idiakez derrotó (2-1) al Rayo Majadahonda en La Romareda. Desde entonces, solo el triunfo copero ante el Deportivo. En Liga, apenas tres empates. Ninguna otra escuadra acumula tanto tiempo sin ganar en casa. Acabar con esta sequía y dar continuidad a la victoria en Tarragona otorgarán ciertos motivos para, al menos, desterrar los sudores fríos. De momento, solo eso.
Está por ver si Alcaraz repetirá el mismo dibujo que revolucionó con éxito al Zaragoza el pasado lunes. Los tres centrales dotaron al equipo de mayor seguridad defensiva y fiabilidad, aunque la fragilidad del Nástic obliga a poner en cuarentena esta mejoría que el Mallorca, un equipo mucho más hecho y peligroso, se encargará de poner a prueba esta noche. Si el técnico granadino decide seguir con el plan, todo apunta a que lo hará con los mismos efectivos que cumplieron en tierras catalanas. De ese modo, Verdasca, Perone y Nieto volverían a formar en el centro de la defensa, con Lasure seguro en el lateral izquierdo y Benito o Delmás en el derecho.
OPCIONES
En el centro del campo, Eguaras, Ros y Pep Biel también parecen destinados a seguir formando parte del once inicial, y Álvaro o Gual acompañarán arriba a Pombo, con más opciones para el primero, que ya participó un rato en Tarragona con gol incluido. El catalán parece ya recuperado por completo de su lesión y no está el Zaragoza como para no contar desde el comienzo con su futbolista con más gol.
Claro que Alcaraz también podría optar por rescatar el famoso rombo, escudado en que el estilo de juego del Mallorca dista notablemente de los tres centrales del Nástic, o en la necesidad de una mayor responsabilidad con el balón como local. En ese caso, Nieto podría perder el sitio en el once para dejar la defensa con cuatro efectivos y James o Zapater reforzarían la medular.
Por su parte, el entrenador del Mallorca, Vicente Moreno, no podrá contar con el central Antonio Raillo, que causa baja por una lesión. Su ausencia se une a las del portero Reina y los defensas Salva Ruiz, Pervis Estupiñán y Martin Valjent. Es probable que el argentino Franco Russo sustituya a Raillo y forme pareja con Xisco Campos en el eje de la defensa.
Los baleares tratarán de explotar el exceso de generosidad del Zaragoza como anfitrión. Solo el Extremadura ha sumado hasta ahora menos puntos en su feudo que un conjunto aragonés que confía en recuperar a su gente tras la ruptura expuesta el último partido jugado en La Romareda frente al Granada. Claro que el Mallorca tampoco está siendo una visita temible. De hecho, únicamente ha ganado un encuentro como foráneo (0-1 en el campo del Rayo Majadahonda). Aunque tan solo ha perdido otros dos -ambos por la mínima en Alcorcón y Granada-. Los otros tres se saldaron con reparto de puntos e idéntico marcador (1-1) en Elche, Lugo y Oviedo.
Pero La Romareda ya no está para más concesiones. El Zaragoza necesita seguir ganando para escapar de la quema y continuar con el propósito de enmienda. En las carreras a contrarreloj, dar un paso atrás es letal para perder de vista el objetivo. Cualquiera que este sea.
