Vicente del Bosque, exentrenador del Real Madrid, está viviendo el fútbol turco desde el corazón de Estambul, donde dirige con suerte desigual al Besiktas. El técnico conoce a la perfección una liga donde predomina "el ímpetu, la pasión y el buen fútbol", explica del Bosque. "Estamos hablando de un país cuya selección fue tercera en el Mundial de Corea y Japón, y no por casualidad". Aquel partido de la cita asiática fue el más espectacular. Hanka Sukur, con el gol más rápido en la historia de esta competición, e Ilhan Masinz despidieron a los coreanos de la tercera plaza en media hora.

El preparador avanza que el Fenerbahce, rival del Real Zaragoza en los dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA, es ahora mismo el mejor club del país. "Es el más potente, con poca diferencia con el Galatasaray, pero sin duda el mejor". También subraya que el conjunto que entrena el alemán Crhistoph Daum se diferencia del resto de sus competidores "por sus individualidades. Tiene seis extranjeros que marcan las diferencias, entre ellos cinco brasileños de un alto nivel". Si hay un mal día colectivo, señala el entrenador del Besiktas, "entonces aparece la calidad de futbolistas capaces de resolver por sí mismos". Su destacada participación en el grupo D de la Champions pese a quedar eliminados también es motivo reseñable para Del Bosque. "Consiguieron nueve puntos y lograron ganar 3-0 al Manchester pese que vinieran los ingleses con un equipo de reservas".

Alex y Marco Aurelio

Entre ese rosario de brasileños, Del Bosque da nota alta a "Alex y Marco Aurelio, dos centrocampistas muy distintos pero sobre los que gira casi todo lo importante que ocurre en el Fenerbahce". Dice que Alex, internacional con Brasil, suele tener lagunas en los partidos, "pero cuando aparece es fundamental porque es un gran pasador, un buen asistente con mirada muy ofensiva. Marco Aurelio es el jefe del equipo y me recuerda mucho a Mauro Silva porque realiza una labor defensiva, de recuperación, impresionante en eje del campo, Y abarca mucho".

No se olvida el entrenador del Besiktas que el Fenerbahce tiene en ataque a un veterano jugador de 35 años, ahora lesionado, que es también fundamental en el 4-3-1-2 que suele emplear Daum, el holandés errante Pierre van Hooijdonk, un junco goleador habitual en la selección holandesa que vivió su mejor momento en el Feyenoord. "Es un futbolista con cierto gol y, como todo el mundo conoce, un especialista en las faltas. Todavía está en forma". Si el tulipán es titular, el brasileño Nobre cae a la derecha, pero en caso contrario este último ocupa el puesto más avanzado del equipo. "Hay que tener especial cuidado también con Tuncay Sanli, que entra muy bien por la banda izquierda. Es un chico muy trabajador, muy ligero, muy constante en su juego. Además tiene una muy buena llegada". Tuncay, es cierto, es peligroso viniendo desde atrás: marcó la temporada pasada 16 goles en 31 partidos.

Del Bosque sorprende al afirmar que en Turquía "el fútbol se vive con más pasión incluso que en España. Las aficiones son muy fogosas, y la prensa está siempre encima de los clubs". Los hinchas del Fenerbahce "no son nada violentos. Animan sin cesar a su equipo, meten mucho ambiente con cánticos y gritos pero no son gente agresiva, ni mucho menos".

Sobre la eliminatoria con el Real Zaragoza, Vicente del Bosque estima que será "equilibrada. Le ha de tener mucho respeto al Fenerbahce, pero no miedo. Además el Zaragoza cuenta con la ventaja de jugar el primer encuentro en Estambul".