El Real Madrid encontró menos oposición de la esperada en su visita a Anoeta, se impuso con rotundidad por 0-4 a la Real Sociedad y mantiene vivo el sueño de ganar al Atlético de Madrid y al Barcelona en la carrera por el título de Liga. Asier Illarramendi, en el último minuto del primer tiempo, abrió el marcador en su retorno al estadio que le vio despuntar y allanó el camino de la victoria a los blancos.

El conjunto de Carlo Ancelotti sabía al empezar el choque que Atlético de Madrid y Barcelona habían ganado sus partidos y que, por tanto, todo lo que no fuera vencer le podía dejar virtualmente sin opciones en la Liga. Apostó, no obstante, el Real Madrid por un juego de control y por esperar a que se desgastara una Real ambiciosa que focalizó todo su peligro en la botas de un activo Carlos Vela.

Sin Ronaldo, al que Ancelotti dio descanso para que se recupere de sus problemas de rodilla, los blancos tomaron la referencia en Benzema, pero Iñigo Martínez cerró las vías de acceso al área local al delantero francés durante los primeros minutos. En un choque igualado pudo moverse el marcador a favor de los blanquiazules en el minuto 22, en un remate de cabeza de Griezmann. No lo hizo y desde el psicológico tanto de Illarramendi antes del descanso, el Real Madrid se paseó. Tres goles (Bale, Pepe y Morata) lo certificaron.