La SD Huesca vivió el miércoles un día histórico con la visita del Barcelona. La jornada de fiesta e ilusión de una ciudad ávida de fútbol de primer nivel tras dos temporadas en el pozo de la categoría de bronce no pudo ir mejor. Y es que tan solo el resultado del partido dejó un cierto poso de decepción en la incondicional afición oscense que abarrotó El Alcoraz y que animó a su equipo hasta el último minuto.
Según las primeras estimaciones del club altoaragonés hasta 6.200 personas se acercaron al estadio para vivir un día único en la historia más reciente del club. Con estas previsiones solo 600 asientos quedaron libres, la mayoría de ellos en la tribuna supletoria instalada en el Gol Norte que quedará desmontada a lo largo de esta tarde y que amplió el aforo de los 5.300 espectadores hasta los 6.800. También se llevaron a cabo mejoras en el sistema eléctrico con la instalación de 16 nuevos focos que se mantendrán de forma permanente y que supondrán también una mejoría para los aficionados.
Con motivo de la importante cita deportiva la ciudad se movilizó para poder vivir con garantías el encuentro. Los hoteles vieron como aumentaban las reservas desde el mismo día de la celebración del sorteo de dieciseisavos de final y también el transporte se vio modificado para adaptarse al horario del partido. Dadas las limitaciones existentes en el aparcamiento más próximo a El Alcoraz, el Ayuntamiento, en colaboración con la compañía Alosa, puso a disposición de los aficionados autobuses para poder desplazarse hasta el campo. El sistema de transporte fue todo un éxito, dando cobertura a 338 usuarios que utilizaron el servicio antes y después de la finalización del partido.
AHORA, A POR EL CONQUENSE
En cuanto al ambiente generado por la llegada del equipo catalán, para Raúl Ojeda, gerente del club oscense, "fue una noche espectacular, la afición respondió como se esperaba, y aunque no pudimos conseguir la victoria ante un equipazo la gente disfrutó como no lo hacía desde hace mucho tiempo. El verdadero premio fue poder jugar contra un equipo de primer nivel con todo lo que eso conlleva", señaló. Tras la derrota por 0-4, el equipo que dirige Tevenet no guardó descanso y se entrenó ayer por la tarde para preparar la importante visita del próximo domingo a Cuenca para enfrentarse al Conquense y seguir instalado en la parte noble de la clasificación en Segunda B.
