Lionel Andrés Messi Cuccitini pretendía, cuando era un juvenil, que el mundo pudiera recordar su nombre. Lo ha conseguido sobradamente diez años después. El suyo es ya un nombre inolvidable, que quedará grabado por los siglos de los siglos. Y que durará más que el de Paulino Alcántara. El goleador más célebre, por prolífico, de la historia del Barça ha permanecido como un referente durante 87 años. Nadie se acercó a registros propios de la prehistoria futbolística. Hasta que llegó un delantero argentino, también propio de otro siglo, para apearle del simbólico trono.

El delantero adelantó a Alcántara y le relegó a un futuro olvido, como paulatinamente superó a los grandes prohombres de la historia azulgrana. Los más famosos y los más productivos: primero César Rodríguez, luego Pepe Samitier, finalmente Alcántara, héroes que traspasaron la barrera de los 300 goles. Respetuoso con el mito al que destronó con un triplete el domingo, elevando los 369 goles del primer Romperredes hasta la cota de los 371 (y subiendo), Messi homenajeó a Alcántara.

De palabra --"es espectacular entrar en la historia de un club tan grande", dijo el domingo-- y en su página de Facebook, con una ilustración que los reúne a los dos en una caricatura. Messi honró a Paulino también con un triplete el domingo (Alcántara se estrenó con tres goles el día de su debut el 25 de febrero de 1912) y relanzó el ánimo del Barça. En el mejor momento. En la antesala de la decisiva visita al Bernabéu, donde el equipo ventila gran parte de sus opciones a revalidar el título de Liga. El astro argentino, enrachado, corre --lleva 12 goles en los últimos 9 partidos-- para orillar al mito del Madrid, Alfredo Di Stéfano, con quien está empatado como máximo goleador (18) en los clásicos.

Atrás se quedará la vieja leyenda argentina. Como las azulgranas, como las blancas. Messi ya superó a Raúl en la clasificación histórica de la Liga, y pronto le derrocará de la cúspide como máximo goleador europeo. La misma suerte correrá Hugo Sánchez, a un gol de distancia en el campeonato español, del mismo modo que Zarra (18 goles arriba) dejará salvo sorpresa de ser el número uno antes de cumplir 60 años de reinado.