Tienen un largo romance con la montaña. Son fuertes y experimentados y se acercan a uno de su grandes amores en solitario. Esta situación es para ellos lo más próximo al paraíso. Hacen largas travesías cargados con la mochila, suben tresmiles, visitan hermosos ibones o preparan las ya muy populares carreras por montaña. No temen sufrir un accidente y se conocen palmo a palmo el Pirineo aragonés.
Pero para algunos ámbitos del montañismo aragonés, acudir en solitario al monte no es la situación más recomendable. "A veces por falta de compañeros, a veces por el placer de disfrutar de la montaña sin compañía, difícilmente podremos convencerles de que dejen de ser montañeros solitarios", explica la página de la campaña Montaña Segura. "Un 5% de los montañeros que fueron encuestados eran de grupos de una sola persona. Pero en los encuestados en el Aneto y el Monte Perdido el porcentaje aumentó hasta el 10%", explica la página web www.montanasegura.com.
Son conscientes de las exigencias físicas y técnicas de la actividad que realizan y del plus de riesgo que asumen y no están dispuestos a cambiar de situación. Luis Masgrau, presidente de la Federación Aragonesa, piensa que "hay que ir un mínimo de tres personas para que una se quede con el accidentado y otro puede ir a buscar socorro. Sabemos que hay gente muy experta, que son muy buenos física y técnicamente. Pero hasta en la excursión más sencilla es una temeridad ir solo", explica el dirigente. Masgrau hay ido en solitario en escasas ocasiones. "Era porque no quedaba más remedio y fui a la Aigueta de Batisielles. No iba nada cómodo porque, si me tuerzo el tobillo bajando, se que no tengo cobertura telefónica bajando", dice.
Planificación
El oscense Javier Bueno es guardia civil y uno de los mejores escaladores de España. "El concepto de la seguridad está en uno mismo. Todo hay que interpretarlo desde un punto de vista objetivo. Vas a dar un paseo a la montaña solo si estás preparado físicamente, conoces el terreno, tienes las previsiones antes de hacer la actividad, das las referencias a amigos y familiares de lo que vas a hacer y lo llevas todo controlado", indica.
Bueno va numerosas veces solo al monte. "La mayoría de las veces voy en grupo. Pero si algún día voy a coger setas o a explorar unas paredes, puedo ir solo. La interpretación de que me quiero encontrar a mí mismo y quiero estar tranquilo la contemplo. No estoy de acuerdo los que piensan que es una temeridad ir solo. Los corredores por montaña se entrenan muchas veces en soledad", reconoce.
El himalayista Raúl Martínez tenía pensado viajar esta semana desde Zaragoza hasta el Pirineo y realizar una excursión sin compañía. "Es posible que me vaya a Batisielles, un lugar muy bonito. También es posible que realice un pico sin dificultad técnica. Rincones del Pirineo a donde ir tengo a patadas. Hay lagos o picos como Peña Montañesa, el Turbón o Cotiella, que están a mano para ir y volver en el día", indica el montisonense.
Este verano se han producido hasta la fecha 200 intervenciones de los Grupos de Rescate de la Guardia Civil y el pasado fin de semana hubo nada menos que nueve. El listón de accidentados se supera año a año y casi todos los afectados van en grupo. "No significa que estés más seguro si vas en grupo. Se puede producir un accidente en una arista con 70 personas por delante del accidentado y con 40 por detrás. Los accidentes en grupo son a patadas. Puede ser tan complicado pasear 500 metros si nunca has entrenado como ascender al Everest. Conozco más de un alpinista de gran experiencia y condición física que ha fallecido", indica Martínez.
Vivió una experiencia en solitario de cinco días solo en una montaña de 7.005 metros. Fue en el 2004 en el Korzhenevskaya. "Acudí con Chus Lago y Merab Khabazi. Ellos fueron por un lado y yo por otro. Tenía que ser autosuficiente y se complicó la situación. No llevaba walkie y una mochila muy pesada", apunta.
