La UEFA, hasta el día de ayer, había vendido el 97% de las entradas puestas a la venta para la totalidad de encuentros de la Eurocopa. Sólo quedaban en taquilla 35.000 localidades, del 1.200.000 repartidas para contemplar en directo los encuentros de la competición. Estas entradas corresponden a los partidos menos atractivos del torneo: Suiza-Croacia, Suecia-Bulgaria, República Checa-Letonia, Bulgaria-Dinamarca, Rusia-Grecia y, sorprendentemente, Italia-Bulgaria. E. P.