El cambio de año no le ha sentado bien al Espanyol. Tras cerrar el 2020 con cinco victorias consecutivas que le permitieron comerse las uvas como líder, el equipo blanquiazul ha caído derrotado este domingo en Las Palmas (1-0), lo que deja vía libre al Mallorca para asaltar la primera plaza si esta noche gana en Oviedo.

El VAR le ha amargado la tarde al conjunto de Vicente Moreno, que ha jugado toda la segunda parte con 10 por una controvertida expulsión de Lluís López. Los jugadores periquitos también reclamaron falta previa en el gol de Rober González y sumaron más enfado con el videoarbitraje tras anularse, esta vez con acierto, el gol del empate de Nico Melamed por fuera de juego de Raúl de Tomás en el inicio de la jugada.

"No sabe ni qué ha pitado"

"Son dos errores graves que nos perjudican: en el gol de Rober obviamente hay falta previa, y en la expulsión creo que ni el árbitro sabe lo que lo ha pitado", manifestó aún en caliente el capitán blanquiazul, David López. "Pero no se puede hablar del árbitro, prefiero hablar de los errores que hemos cometido nosotros. Somos mejores de lo que hemos demostrado hoy", ha admitido el defensa de Sant Cugat.

Entre los errores periquitos estuvo una floja primera media hora en la que estuvo a merced de su rival. El balón era para los locales y Melendo, Embarba, Puado y De Tomás ni lo veían. Apenas hubo dos ocasiones claras en ese tramo, pero definieron el partido a favor de los canarios. Un gran pase en profundidad de Melendo lo controló en el área Pedrosa, que cedió a De Tomás para que fusilara, pero esta vez el 'pichichi' no estuvo fino y la mandó incomprensiblemente fuera. El desastroso Ocón Arráiz señaló fuera de juego, aunque el VAR habría validado el tanto de haber acertado RDT.

En la siguiente jugada, la zaga del Espanyol pecó de falta de contundencia para despejar un balón y una serie de choques y rebotes acabaron con el balón en la frontal en los pies de Rober, que conectó un zurdazo que Diego López tocó pero no pudo atajar (m. 26).

El tanto espabiló al Espanyol, que acabó la primera mitad instalado en el campo rival, moviendo bien el balón, a la espera de un último pase definitivo que no llegaba. El conjunto de Pepe Mel acabó pidiendo la hora, pero se fue con ventaja a los vestuarios.

Mejor con 10

Esas buenas sensaciones para los blanquiazules se volatilizaron con la estrafalaria expulsión de Lluís López. Diego López le hizo una mala cesión y el central llegó apurado a impedir que Rober se llevara el balón. El defensa sacó el balón plantando el pie en el suelo y el atacante se fue al suelo. Ocón Arráiz pitó una falta más que discutible y el VAR le llamó para reclamar la roja por ser el último defensa.

La empresa del empate se antojaba titánica, pero aun con 10 el Espanyol tuvo ocasiones para volver con un punto. Nioo Melamed, que había entrado al descanso, marcó un gran gol con un disparo desde la frontal, pero el VAR detectó el fuera de juego de Raúl de Tomás en el inicio de la jugada (m. 68).

El Espanyol apretó hasta el final, con Melamed, Wu Lei, Puado y RDT buscando un empate que tuvo el primero en sus botas. Un rechace de un central le dejó solo en la esquina del área pequeña, pero su disparo de primeras se estrelló contra el lateral de la red (m. 87).