La eurozona registró un crecimiento del 0,3 % en el cuatro trimestre del 2013 respecto al trimestre anterior, 0,1 puntos más de lo esperado inicialmente por los analistas, según ha anunciado Eurostat, el organismo de estadísticas europeas. El nuevo dato confirma la consolidación de la recuperación económica europea, pero muestra que esta recuperación será lenta. La tasa anual de crecimiento de la eurozona se situó en el 0,5% en el cuarto trimestre, abandonando definitivamente los números negativos, ha precisado Eurostat.

La mejora económica de la zona euro en el último trimestre del 2013 es consecuencia del crecimiento más alto del previsto del producto interior bruto (PIB) de Alemania y Francia, los dos principales motores económicos de la eurozona. La economía alemana registró un crecimiento trimestral del 0,4% en el cuarto trimestre y Francia un crecimiento del 0,3%.

El crecimiento trimestral del 0,3% de la economía española en el último trimestre del año y el fuerte crecimiento del 0,7% de la economía holandesa también han contribuido al alza del PIB de la eurozona mejor de lo esperado inicialmente. Italia, por el contrario, solo consiguió un crecimiento trimestral muy débil en el cuatro trimestre: el 0,1%.

En el conjunto de la UE, el crecimiento trimestral fue del 0,4% en el cuarto trimestre del año y su tasa anual se situó en el 1%, el doble de la media de la eurozona.