El Gobierno quita hierro a la caída de la llegada de turistas extranjeros a España y considera que se trata de un proceso lógico de «normalización de los flujos turísticos». Al menos eso es lo que afirmó ayer la ministra de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto, en Nueva Economía Fórum celebrado en Barcelona. La ministra aseguró que «no preocupa» que España recibiese en agosto 10,2 millones de turistas internacionales, el 1,9% menos que en el mismo mes del 2017, ya que el gasto aumentó el 6,7%, por lo que en conclusión «vienen menos pero gastan más», afirmó Maroto. El sector turístico en España cerró julio y agosto con unos ingresos generados por los turistas extranjeros de 23.286 millones de euros, 42 millones más que el año pasado, pero con una caída de viajeros del 3,8%.

La ministra aseguró que su objetivo es hacer que la industria pase del 16,4% del PIB a más del 20%. No dijo a costa de qué sector o rama de actividad. El instrumento para conseguirlo sería la nueva ley de industria.