En el sector agrario nadie duda de que la recuperación económica está en marcha, en contraste con otras actividades que son titubeantes. La Feria Internacional de Maquinaria Agrícola (FIMA), que mañana clausura la que está siendo su edición más multitudinaria, es un fiel reflejo de ese optimismo. Ayer fue el cereal, que supone el 32% de la superficie total cultivada (42% en Aragón), el que se sumó a los buenos presagios. La previsión de cosecha para este año apunta a repetir la gran campaña del 2013, que fue de récord.

Así quedó de manifiesto en el XII Encuentro Nacional de Operadores de Cereales, que protagonizó ayer la tercera jornada de la muestra, que también acogió conferencias sobre la ganadería avícola o el cultivo del pistacho.

En la jornada de cereal se dieron cita todos los operadores de este negocio (desde productores y comerciantes a fabricantes de piensos y harina). "El sector primario es en estos momentos el más estable y el que está dando alas a la economía española desde que entramos en la crisis", afirmó Marcos Martínez, presidente de la Asociación de Comercio de Cereales y Oleaginosas de España (Accoe).

La producción de cereales de invierno en el último año agrícola fue de 20 millones de toneladas y de 5 millones la de maíz. En total, un volumen de 25 millones, un 55% superior a la del 2012. Aragón se consolidó como cuarto productor nacional y segundo en trigo duro, solo superada por Andalucía.

A pesar de alcanzarse la cifra "récord" de las últimas décadas, España no cubrió toda la demanda interna, que se sitúa en 30 millones. "Seguimos siendo deficitarios", señaló Martínez.

En cuanto a los precios, estos bajaron un 30% respecto a la campaña anterior, en la que fueron altos por una drástica caída de la producción en EEUU. Para este año, la superficie sembrada es similar a la del 2013 y las perspectivas de cosecha son en estos momentos "muy buenas", según Accoe. Los cultivos están en un estado "óptimo" y en comunidades como Aragón, Castilla La Mancha y Extremadura --las primeras en cosechar a finales de mayo--, la humedad y el nitrogenado son "abundantes", explicó Martínez. "Las previsiones apuntan a que por lo menos se igualará la cosecha del año 2013", concluyó.

"Este es un sector vivo y solvente, y con los acuerdos de la nueva PAC la situación va a perdurar así hasta por lo menos el año 2020", auguró el presidente de la asociación cerealista.