La danza emulará a los grandes conciertos en el pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza el próximo 9 de noviembre con una producción en la que el bailarín aragonés Miguel Ángel Berna va a celebrar sus 40 años sobre los escenarios en lo que será «un espectáculo que no se volverá a repetir». En la gala 40 años en danza. Toda una carrera, el bailarín reflejará sobre las tablas sus más de cuatro décadas de carrera profesional en la que ha realizado más de 20 montajes y que ayer presentó junto a Manuela Adamo, en el museo Pablo Serrano .

Durante unas tres horas de espectáculo, Berna repasará en cinco grandes bloques lo que ha sido toda su trayectoria profesional desde sus primeros pasos en la jota y finalmente en el ámbito de la danza y el baile.

En la presentación de este nuevo espectáculo en el que ya está trabajando, y para el que ha anunciado que ya se han puesto a la venta las entradas en Ibercaja, Berna reconoció que en estos cuarenta años que va a celebrar «han pasado muchas cosas en esta tierra» que le ha propuesto grandes retos y «no ha podido escapar».

Berna explicó que en el montaje, en el que va a contar con sus colaboradores más habituales a lo largo de su carrera, habrá un «nexo de unión común, la jota», que es de donde proviene, y lo que le ha hecho entender «cómo es mi tierra y mi gente».

El montaje en el pabellón Príncipe Felipe supone «un reto» por lo que su deseo es que «40 años en danza» sea un gran espectáculo con sonido y audiovisuales, en lo que va a suponer un recorrido por la historia reciente de España desde que comenzó a bailar «cuando murió Franco, y podría contar todo lo que ha sido la Transición». «Intentaré buscar la ecuación para que la música y la danza estén paralelamente sobre el escenario en un espectáculo que se dividirá en los bloques que han marcado mi trayectoria», anticipó.

El arte a través del mudéjar le ha servido «como fuente de inspiración» y será el protagonista del primer bloque en el que habrá una fusión de culturas en la que tratará de plasmar en su «época» los sonidos judíos, árabes y sefardíes donde también tendrán cabida los tambores del Bajo Aragón. La jota aragonesa es donde empezó Berna, que se arrepiente «de no haber seguido cantando», aunque anticipó que puede que cante «en el espectáculo», por lo tendrá gran protagonismo en el montaje y para ello espera contar con grupos folclóricos de las tres provincias porque «es importante hacer esta unión». Quien tampoco faltará es Nacho del Río.

En el tercer bloque conjugará el pasado, el presente y el futuro, donde aparecerán los artistas que ha dado Aragón y que le han servido para algunos de sus montajes, como Goya o Buñuel, pero también está pensando en que pueda aparecer Ramón y Cajal, además de pintores como Pepe Cerdá, Jorge Gay y Martínez Tendero. En esta parcela ha destacado el protagonismo que tendrá el cineasta Carlos Saura.

Las danzas, con el flamenco, la clásica y la contemporánea, aparecerán en otra de las partes destacadas y entre ellas ha apuntado que la primera ha sido «la que más» le ha marcado ya que es «una parte de la cultura y su unión con el pueblo». También aparecerá LaMov.

Finalmente, las nuevas tecnologías y la actualidad centrarán el último bloque en el que pretende unir la jota y el rock de una manera diferente y acercar y unir el baile aragonés a la electrónica y el mundo audiovisual.