Las corridas de toros descendieron en Aragón un 15% en el año 2013 respecto al año anterior, si bien se incrementaron los festejos taurinos populares un 5,5%. Unos datos que se dieron a conocer ayer en la Comisión Consultiva de Asuntos Taurinos celebrada en Zaragoza presidida por el consejero de Política Territorial e Interior del Gobierno de Aragón, Antonio Suárez, con la participación del director general de Interior, Javier Artajo.

Durante el 2013 se desarrollaron en la comunidad 53 espectáculos taurinos mayores, frente a los 62 del año anterior, lo que representa un descenso del 15 % que tiene relación directa con la crisis económica, según señaló el propio Suárez, que reconoció que desde el año 2003 se registra un continuo descenso en el número de corridas. Zaragoza, con 24 festejos mayores, es la capital aragonesa que más corridas taurinas acogió en 2013, seguida de Teruel, con una menos, mientras que en Huesca solo se celebraron 6.

"UNA BUENA SEÑAL"

Frente al descenso del número de espectáculos mayores, el de festejos taurinos populares aumentó en 2013 un 5,5% pasando de 997 en 2012 hasta los 1.052 del pasado año, una tendencia que rompe así el descenso iniciado en el año 2007. El director general de Interior calificó este aumento como "una buena señal" que indica que la situación "se está empezando a normalizar".

La comisión, además, celebró la aprobación de la Ley 18/2013, de 12 de noviembre, para la regulación de la tauromaquia como patrimonio cultural, máximo rango que otorga el ordenamiento jurídico nacional para un bien inmaterial. La ley aprobada incluye medidas de protección de la Tauromaquia así como de promoción y difusión de la cultura taurina.

Además, volvió a reclamar al Gobierno de Aragón la declaración como BIC de los toros, una solicitud a título particular que se suma a la que ya han realizado otras administraciones tras la aprobación, en noviembre pasado, de la ley estatal para la regulación de la tauromaquia como patrimonio cultural. Artajo recordó que el Gobierno de Aragón ya promovió la solicitud de esta fiesta como BIC y que la petición quedó en suspenso porque las Cortes Generales la habían decidido promover a nivel estatal. Una vez aprobada la ley en noviembre, la Comisión Consultiva de Asuntos Taurinos de Aragón decidió ayer volver a pedir al gobierno autonómico su declaración BIC.