«Para mí, escribir es una forma de evadirme, igual que leer». Así puso de manifiesto su pasión por la escritura Gabriel Del Molino, quien acaba de publicar su primer libro de microrrelatos titulado #1minuto. Un compendio de 95 microrrelatos que se pueden leer en un minuto, de ahí el título, es el resultado de una idea que nació hace unos tres años.
«Encontré una editorial que me facilitaba sacarlo por mi cuenta, mandé los textos y les encajaron con lo que querían publicar», contó Gabriel Del Molino. «No fue un proceso difícil, sino novedoso y bastante cómodo», afirmó el autor, que inició una exitosa campaña de crowdfunding para financiar la primera edición.
El autor de #1minuto declaró que «son relatos motivados por una sensación, por estar con alguien o imaginarlo» y que todos comparten «un deseo de despertar emociones, que muchas veces están dormidas».
Realmente, la idea de publicar un libro surgió de lanzar un reto por Facebook, diciendo que si un relato que colgó en esta red social llegaba a los cien me gusta, escribía un libro. «Me quedé en noventa y pico, pero para mí era como si hubiera sido cien y ese fue el detonante, aunque siempre había tenido la ilusión de escribir», confesó Del Molino. Sus fuentes de inspiración son anhelos, ilusiones, y, por supuesto, «hay personas detrás de los relatos». De hecho, este libro está basado en sus últimas experiencias.
«Empecé a escribir con quince años; hubo un libro, Cien años de soledad de García Márquez, con el que conocí muchas formas de escritura», explicó el escritor. «Suelo escribir por las noches antes de dormir, aunque a veces la inspiración viene en otro momento y, entonces, tomo notas», reconoció.
TAMBIÉN HAY ARTE
El libro cuenta con ilustraciones que son pinturas que han hecho amigos de un taller al que el autor acude regularmente. «Un día sin avisar, les llevé unos relatos para que los expresaran en ilustraciones, sin ningún tipo de restricción», aseguró Gabriel Del Molino. De ahí salieron las 15 ilustraciones que acompañan los relatos que, según el autor, «son obras maravillosas que le dan un carácter diferente al libro».
Así, afirmó que «escribir le aporta mucha tranquilidad» y que, en el momento en el que descubrió que es una forma de evadirse sin molestar a nadie, comprendió que «la palabra podía ser muy importante». Hace unas semanas, publicó su libro en papel, ya está disponible en alguna librería y pronto, en Amazon.
