Gervasio Sánchez: la voz de los sin voz

AUTOR Gervasio Sánchez

LUGAR IAACC Pablo Serrano

FECHA Hasta el 22 de febrero, 2015

"Sólo los ojos son capaces de dar un grito", escribió el poeta René Char. Así lo testimonian los ojos de los silenciados a quienes Gervasio Sánchez retrata, sabiendo que al hacerlo adquiere el compromiso de ser la voz de los sin voz. "Debemos la voz", escribió Federico Mayor Zaragoza en su reflexión para el catálogo de la exposición Latidos del tiempo que reunió a Gervasio Sánchez y Ricardo Calero en la Lonja, en 2004. Debemos la voz al silencio que sigue a la destrucción. "Silencio de los silenciados, de los amordazados. Silencio de la ignorancia. Terrible silencio. Pero más terrible, hasta ser delito, el silencio culpable de los silenciosos. De los que pudiendo hablar, callan. De los que sabiendo y debiendo hablar, no lo hacen".

Gervasio Sánchez fotografía, escribe y denuncia las guerras y sus consecuencias. Cuando fotografía elige un punto de vista próximo físicamente; idéntica posición que cuando escribe, interroga o denuncia. Pero sabe, como escribió José Jiménez en el catálogo mencionado, que el arte ha de establecer "una distancia entre el acontecimiento y la representación"; de ahí que la proximidad, necesaria para ver, tenga que conjugarse con la distancia, precisa para dar que pensar y sentir.

Desde 1984 Gervasio Sánchez ha ejercido en diferentes medios como fotoperiodista independiente. Se inició en Centroamérica, donde aprendió a fotografiar. A los primeros reportajes realizados en El Salvador y Nicaragua siguieron los de Guatemala, Chile, Panamá, Perú y Bolivia. "Creo que incluso Dios se puso al corriente del mundo tan solo a través de los periódicos", escribió Brecht antes de 1933. Pero no bastaba, consideró también Joseph Roth, en 1929: "Si el periódico era tan inmediato, tan sobrio, tan rico, tan fácilmente controlado como la realidad, entonces sin duda podría, como ésta, comunicar experiencias vividas. Sólo que ofrece una realidad que no es segura, que está filtrada, y una realidad a la que se da una forma insuficiente, lo cual quiere decir por consiguiente: una realidad falsificada. Porque no hay otra objetividad que una objetividad artística. Solo ella puede representar un estado de cosas de manera conforme a la verdad".

Ese es el propósito de Gervasio Sánchez, que en 2009 recibió el Premio Nacional de Fotografía; con tal motivo se organizó en 2012 la exposición antológica que ahora llega a Zaragoza tras una larga itinerancia. Sandra Balcells seleccionó con el autor una amplia secuencia de imágenes organizadas en bloques temáticos: América Latina (1984-1992), Balcanes (1991-1999), África (1994-2004), Vidas minadas (1995-2007), Desaparecidos (1998-2010) y Retratos.

El registro documental de las mejores fotografías aúna información y reflexión. Lástima que la prescindible banda sonora rompa el silencio.