"Goya fue revolucionario al representar los espíritus que habitan el inconsciente y espantan al ser humano". Así lo aseguró ayer el lingüista, sociólogo e historiador Tzvetan Todorov, quien considera que el pintor aragonés fue el más grande de su época, alguien que abrió caminos en el ámbito de la reflexión y la creación.

El premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales del 2008 convirtió la presentación de su última obra, La pintura de la Ilustración. De Watteau a Goya, en una disertación sobre ese momento, cuando la pintura empieza a no representar ni lo puramente real, ni la belleza ideal, sino que "aspira a captar la verdad del mundo".

Publicado por Galaxia Gutenberg, en este volumen, el tercero de una serie, Todorov se centra en el siglo XVIII a través de cuatro artistas europeos, Antoine Watteau, Alessandro Magnasco, William Hogarth y Francisco de Goya, de los que muestra un centenar de obras en color, desde conocidos lienzos a dibujos y grabados.

MOMENTOS HISTÓRICOS

Con estos libros, el filósofo quiere analizar determinados momentos históricos de Europa y de su cultura, intentando "explicar la evolución de la manera de pensar a través del análisis de la pintura". "He querido con los tres libros aprovechar la historia del arte para ver cómo han evolucionado nuestras mentalidades", apuntó.

En La pintura de la Ilustración, el sociólogo explica cómo se inicia la presencia del individuo en los cuadros, en contraposición a épocas anteriores, con "sujetos intemporales, personajes sobrenaturales, del cielo o del infierno, que ahora quedan apartados".

Asimismo, destacó que se empiezan a representar imágenes que tienen que ver con lo marginal, el crimen, las prostitutas o los locos, o también se consolida y generaliza el descubrimiento del niño en sí mismo, dejándose de ver como hombres y mujeres incompletos.

A su juicio, es el momento en el que se "representan seres y objetos por ellos mismos, sin aspirar a que sean verdad absoluta" y, en este sentido, Goya es el "pintor más grande de la época porque, además, cuestionará el sentido de la Ilustración y se acabará situando en una posición crítica". Por otra parte, es el artista que descubrirá "el inconsciente y las experiencias nocturnas de los hombres, hasta ese momento, secundarias".

UN ARTISTA "CONTEMPORÁNEO"

Precisamente, reconoció que cuando empezó a trabajar en esta obra, imaginaba que Goya contaría con un capítulo especial, pero al ir entrando en su vida y obra, quedó "tan impresionado y afectado" que decidió cambiar de planes y escribir un libro sobre él y después, pudo volver a este proyecto y acabarlo.

Para Tzvetan Todorov, el pintor de Fuendetodos debe verse como el artista de esa época "más contemporáneo a nosotros".

En su comparecencia, el también crítico literario consideró que el siglo de la Ilustración es el que provoca que haya "un equilibrio entre la representación del mundo exterior y la subjetividad del mundo del artista".

En la actualidad, en cambio, y excepto en algunos casos, "la pintura ya no representa el mundo exterior, porque es algo que cede a otras disciplinas, como el cine o la fotografía".

Preguntado sobre si la pintura del siglo XX o la de inicios del siglo XXI puede definir el momento, el intelectual ha argumentado que "la pintura actual expresa nuestro siglo pero no lo representa".