El ilustrador y escultor Juan Iranzo (Teruel, 1980) coincide con el diestro Imanol Sánchez (Zaragoza, 1988) en que el arte del toreo se ha utilizado como un instrumento político tanto por los que están a favor como en contra.

Ambos se han pronunciado sobre este tema, en declaraciones a EFE, con motivo de su participación en un acto en Pedrola (Zaragoza) en una jornada en la Casa de la Cultura, donde Iranzo tenía previsto repartir varios ejemplares de su libro infantil "Toros para niños", publicado gracias a una campaña de crowdfunding y donde podrá verse también una exposición de trajes de luces.

Iranzo considera que el mundo taurino ha vivido en una burbuja durante muchos años, sin prestar atención a un movimiento tan "fuerte" y "global" como es el antitaurino y ahora, cuando comienza a reaccionar, llega "tarde y mal".

Iranzo, quien trabaja desde 2009 en dar a conocer la tauromaquia a los niños, cree que desde hace años el sector taurino ha estado dirigido por personas que no han sabido ver "más allá de su círculo" y han continuado haciendo las cosas como en el siglo XIX, cuando la sociedad ha cambiado.

Para Iranzo, el mundo taurino ha sido un "negocio endogámico", donde cada ganadero o torero ha velado por sus propios intereses, sin aunar esfuerzos para trabajar por la supervivencia de este oficio.

"Cada uno ha mirado por sus intereses, ha sido un sálvese quién pueda y así no nos podemos hacer fuertes", ha afirmado.

Durante mucho tiempo, el sector taurino ha estado mirándose el "ombligo", ha insistido, sin prestar atención a un movimiento tan fuerte y global como es el antitaurino, que, a su juicio, sí ha sabido transmitir sus mensajes con eficacia.

Y mientras este movimiento ha tomado fuerza, Iranzo ha explicado que el mundo del toro no ha reaccionado y no ha sabido contrarrestarlo con argumentos, lo que podría haber evitado "muchas mentiras" posteriores.

"Hemos estado generaciones sin saber enseñar lo que es esto y ahora llegamos tarde y mal", ha indicado Iranzo, convencido de que hay que contar la tauromaquia de otra manera.

En este contexto, Iranzo ha decidido poner su granito de arena y publicar un libro dirigido a los niños, dividido en cuatro capítulos: la crianza del toro de lidia; las primeras tauromaquias; la importancia del caballo, adiestrado para la causa, y, por último, la historia de un niño que quiere ser torero.

Por su parte, el toreo Imanol Sánchez ha insistido en el deseo de que la gente conozca cómo se cría y cómo vive el toro, para que luego sea "libre" de decidir si le gusta o no, "más allá de dogmatismos", ya que considera que hay una falta de información.

Sobre la prohibición de espectáculos taurinos, Imanol Sánchez ha señalado que estas medidas responden a "estrategias políticas", algo en lo que también coincide Juan Iranzo, quien ha señalado que el arte del toreo se ha utilizado como un "instrumento político", tanto por los que están a favor como en contra.

"Al final lo que la sociedad no acepta es la hipocresía de ver morir a un animal, pero lo último que vemos los aficionados es la sangre, vemos un complejo de matices y un ritual donde al torno se le trata como a ningún otro animal", ha concluido Iranzo.