Unas 10.000 personas han visitado Kosmópolis, la fiesta internacional de la literatura durante los seis días que ha durado el acontecimiento en el CCCB, en Barcelona. La cifra de asistencia dobla la de la edición de 2002.

Para el director del festival, Juan Insua, Kosmópolis 2004 no ha sido sólo la edición de la consolidación de la propuesta frente a un público mayoritariamente joven sino también de un nuevo modelo "Muchos de los escritores que nos han visitado comprenden que nuestra forma de hacer, que integra audiovisuales y puestas en escena, está dejando obsoleta la fórmula tradicional de la conferencia literaria, aunque evidentemente el formato seguirá existiendo"

ESPACIOS EQUILIBRADOS

Como prueba de la vitalidad que ha demostrado Kosmópolis estos días, Insua valora el equilibrio con el que el público se ha repartido en los diferentes espacios. "Temas más minoritarios o más arduos como es el caso de la literatura india o Más allá de las dos cultura (un acercamiento entre la literatura y la ciencia) han registrado una asistencia media de 150 personas". El cambio de fechas --de diciembre a septiembre-- a fin de situarse bajo el paraguas del Fórum también ha posibilitado la plena ocupación del patio con actividades más lúdicas como el bookcrossing, la participación de los cuenteros y las muestras de hip-hop (una variante moderna y musical de esta misma literatura oral).

El próximo año, coincidiendo con la organización del Año Internacional del Libro, la organización de Kosmópolis baraja la posibilidad de celebrar una edición reducida llamada Plataforma Kosmópolis, con un duración de un par de días, que podría servir de puente a la edición de 2006 y reciclar el material de los anteriores festivales. "Tenemos un gran fondo audiovisual que no ha sido expuesto ", admite Insua.

Según el director, Kosmópolis proseguirá su andadura con una voluntad abierta y plural, tomando la acepción del término cosmopolita, no en su acepción más elitista, sino en la formulada por Jorge Luis Borges según la cual un cosmopolita es alguien sensible a todos los países y a todas las épocas.