Ruth Iniesta (soprano) y Celso Albelo (tenor) han ido celebrando la zarzuela durante toda su carrera profesional. Con giras internacionales por Nueva York, Berlín, Palermo, Italia y en festivales como el Maggio Musicae. Han sido dirigidos por directores de escena como Emilio Sagi o Graham Vick. Ahora, como parte del año cero de la Temporada de Lírica y Danza del Auditorio de Zaragoza, ambos cantantes participan mañana jueves (19.00 horas, sala Mozart) en un­a gala lírica de zarzuela en la que recorrerán grandes clásicos del género, con el acompañamiento de la Orquesta Reino de Aragón, dirigidos por Ricardo Casero. Celso Albelo fue reconocido como Premio Ópera Actual de 2008 y Ruth Iniesta con el premio Artista Revelación 2015 por los Premios Campoamor así como con el premio El ojo crítico, de Radio Nacional de España.

--13 piezas componen el concierto que ofrecen en el Auditorio de Zaragoza. ¿Cuál ha sido el proceso de selección de este repertorio?

--Celso Albelo: El repertorio se escoge en base a las áreas que nosotros proponemos y del punto de vista del director. Entre los tres elegimos las canciones en base al criterio de los tres, una jugada de equipo digamos.

--¿Tienen una temática común?

--Ruth Iniesta: No hay una temática común. Es para festejar nuestro género, que es la zarzuela. Hemos escogido piezas que dentro del género la mayoría son muy conocidas. Pero en las que nosotros nos sentimos cómodos cantando y a la voz de cada uno de nosotros suponga una mayor exposición de todos sus medios. Y para disfrutarlas, que es lo que queríamos.

--Un repaso a los clásicos de la zarzuela. ¿Es necesario conocer previamente este género para disfrutar de su actuación?

--R. I.: No, son piezas perfectamente abordables desde el punto de vista de cualquier persona que nunca haya escuchado zarzuela. Es falso esto de que hay que entender o haber escuchado algo. No, lo que hace falta es que vayas y veas si te gusta o no o ir simplemente a disfrutar.

--¿Es la primera vez que actúan juntos? ¿Cómo se complementan en el escenario?

--R. I.: La primera vez que trabajamos juntos no fue hace mucho, en Bolonia. Luego hemos coincidido en Palermo. Pero compartir escenario solo en una ocasión. Es la tercera producción que hacemos juntos.

--C. A.: Somos compañeros de profesión, españoles e internacionales y a lo mejor no coincidimos cantando en la misma producción. Me unen muchas cosas a Ruth más allá del aprecio como cantante, hay una gran amistad.

--Colaboran en esta producción con la Orquesta Reino de Aragón, con Ricardo Casero en la dirección musical.

--R. I. : Yo había cantando en alguna ocasión con ellos, con la ocasión de la gala homenaje a Pilar Lorengar, a la que fuimos muchas sopranos españolas, hace dos o tres años. Hasta el momento, hemos tenido un solo ensayo común.

--C. A.: El sector musical ha pasado un año complicado. Cuando tienes la posibilidad de realizar tu trabajo con las ganas, el ímpetu de que salgan las cosas bien es latente. Trabajar con los músicos y con el maestro Ricardo Casero es una alegría y una bendición.

--¿Qué tal se están adaptando, como cantantes, a las medidas sanitarias en los ensayos?

--C. A.: Lo que más sufrimos es que nos permitan realizar nuestra profesión. Este tipo de medidas a las que no estamos acostumbrados, obviamente son cosas nuevas a las que hay que adaptarse y comprender que no es solo por la salud propia sino también por la de los demás. Hay que ser solidarios, seguir las cosas que nos aconsejan.

--La pandemia ha afectado al mundo de la cultura ¿ha sido su caso, han sufrido cancelaciones de espectáculos?

--R. I.: A mí se me fue todo el calendario al traste. He tenido la suerte de que han ido surgiendo trabajos de última hora y afortunadamente desde septiembre estuve haciendo hice La traviata en Madrid, en el Teatro Real. Ahora estamos con la maleta preparada todo el tiempo e improvisando.

--Además de los conciertos, ¿tenían algún proyecto paralizado que hayan podido retomar?

--R. I.:_Retomar, retomar… todavía no.

--C. A.: Lo que han hecho en algunos teatros en el caso de Oviedo, del Campoamor, han ido retrasando la actividad en medida que pudieran cometer las producciones para presentarlas cuando Sanidad diera luz verde. Eso es un súper esfuerzo, no solo por parte de los cantantes que tienen que plantearse su vida de quince en quince días, y por parte del teatro. Me siento particularmente orgulloso de que en España haya un circuito de teatros que haya hecho ver que la cultura no solo es necesaria sino en estos casos segura.

--Ambos tienen un reconocimiento dentro y fuera de España, han actuado en teatros alrededor de todo el mundo, Nueva York, Bolonia… La zarzuela es mal llamada género chico, ¿ha cambiado esta percepción en los últimos años?

--C. A.: No veo en la zarzuela cual es la parte chica, quizá está ahí el complejo de ser español, que es una cuestión nuestra erradicar.

--R. I.: Siempre que he hecho algo de zarzuela fuera de España ha tenido un éxito espectacular. Gusta igual que la ópera.