La escritora y psiquiatra María José Moreno, autora de la Trilogía del mal donde aborda el lado más oscuro del ser humano, llama a romper el «pacto del silencio» que asegura que existe ante los abusos sexuales, sobre todo en los casos que se dan en el ámbito familiar.

La autora cordobesa, que presentó ayer en la Fnac la última novela de la trilogía, La fuerza del eros, dentro del festival Aragón negro, aseguró que las consecuencias de los abusos sexuales durante la infancia acaban afectando a la edad adulta, a pesar del esfuerzo de la víctima por olvidar lo vivido.

La trilogía editada por Versátil Ediciones está centrada en una serie de males que acechan a la sociedad y que pasan más desapercibidos, a pesar de estar cerca y de ser capaces de marcar de por vida a sus víctimas. Habla del maltrato psicológico, un asunto que abordó en su primera obra La caricia de Tánatos; de los abusos sexuales en la infancia, en El poder de la sombra o el ciberacoso a menores a través de Internet, en su última novela La fuerza del eros.

Esta psiquiatra traslada a las novelas su experiencia en la consulta, donde ha comprobado que estos males existen. «Escogí tres temas que en mi profesión se ven bastante, me acerqué a ellos porque creía que, aunque todos los conocemos, no sabemos de verdad el daño que hacen», dijo.

Empezó por el maltrato psicológico, algo que siempre ha querido denunciar, porque considera que las víctimas se sienten totalmente «incomprendidas» al no tener un parte de lesiones, y continúo después adentrándose en el abuso sexual en la infancia dentro del ámbito familiar.

La fuerza del Eros lleva a la autora a reflexionar sobre los «depredadores» que pueblan la red al acecho de sus víctimas, niños que no alcanzan a intuir el peligro que corren al exhibirse abiertamente en el mundo de la red. Moreno sostuvo ayer sostenido que el gromming, término con el que se refiere al ciberacoso, se puede prevenir a través de una educación dirigida a formar a los padres sobre los peligros de la red. «Estamos un poco ciegos y, a través de educación y prevención, podemos hacerlo. Si los padres sabemos todo el alcance que tiene esta red, le pondremos coto, para que los menores no se impliquen en situaciones», destacó.

Tras años de trabajo, Moreno reconoció estar contenta por haber terminado una trilogía de este «calibre», donde se ha visto obligada a ponerse en la piel de personajes en situaciones críticas.