Cuando Naciones Unidas aprobó en el 2015 los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030, que interpelan a toda la sociedad en la construcción de un modelo social sostenible, ya se manifestaba el papel clave y transversal de la educación. Sin ella es imposible lograr su cumplimiento. No en vano, aparece de forma específica en el ODS 4, que propugna una educación de calidad, inclusiva y equitativa como base para mejorar nuestra vida y el desarrollo sostenible.

Pero no solo el ODS 4 implica a la educación. Su papel transformador es más necesario que nunca para lograr una ciudadanía que reflexione y tenga una conciencia crítica que le lleve a desarrollar acciones que contribuyan al desarrollo sostenible que se plantea en la Agenda 2030.

¿Pero cómo se pueden abordar los ODS en la educación? Es necesario en primer lugar un compromiso firme por parte de las instituciones educativas para introducirlos en la escuela y en los espacios educativos. Conscientes de esta importancia, en Aragón se planteó la modificación del currículo educativo para adaptarlo a los ODS. Esto supone un paso importante, pero no debe ser el único que se debe dar.

Además de esta introducción curricular de los ODS de forma transversal, las administraciones deben promover una escuela con mayor innovación, que rompa los muros de las aulas para salir a la calle y estar en contacto con lo que le rodea, tejiendo alianzas con otros agentes educativos. Esto se puede conseguir generando espacios de formación (tanto en la universidad como en la formación permanente) que consigan profesorado comprometido, motivado y partícipe en la consecución de la Agenda 2030.

Las escuelas y el profesorado, en su práctica del día a día y con el apoyo institucional que antes se mencionaba, deben abordar los temas relacionados con la sostenibilidad descritos en los ODS y dotar al alumnado de conocimientos, valores, habilidades y actitudes que empoderen a los individuos como agentes de cambio. Y de esta forma, la escuela se convierte en un catalizador que fomenta una nueva generación de una ciudadanía con inteligencia ecosocial, que contribuye a la transición hacia un futuro más justo, sostenible y equitativo, como el que marca la hoja de ruta de los ODS.

Para poder reflexionar sobre todo lo anterior, y para ver la importancia de trabajar los ODS en el ámbito educativo, desde el espacio Unaquí de la Federación Aragonesa de Solidaridad (FAS) se han organizado las jornadas online ‘Objetivos de Desarrollo Sostenible: experiencias de trabajo en espacios educativos’, que se llevarán a cabo los días 23 y 25 de marzo.

En estas jornadas también se visibilizarán algunas experiencias significativas de centros educativos aragoneses que ya están trabajando los ODS y los tienen incorporados en sus planes educativos de centro, con el objetivo de poner en valor estas buenas prácticas y motivar a otros docentes y centros educativos para emprender el necesario viaje de incorporar los ODS y la Agenda 2030 en su labor educativa diaria.