Las elecciones catalanas están enfangando las relaciones entre el PSOE y Unidas Podemos. Al menos, así lo cree la ministra portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, que ha acusado a la proximidad de los comicios catalanes la actitud de sus socios morados respecto a la reforma del Código Penal para que los delitos de opinión no acarrearan penas de cárcel. Intentando quitar hierro al encontronazo que vivieron el pasado lunes a última hora en el seno del Gobierno de coalición, Montero ha insistido en que hay que entender el "contexto" actual, con las urnas en Cataluña a la vuelta de la esquina. Del mismo modo, ha señalado que las alusiones del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, sobre que en España no se da una situación de "plena normalidad política y democrática", también responden a las dinámicas propias de la batalla electoral.

Tras la condena al rapero Pablo Hasél a nueve meses y un día de prisión por enaltecimiento del terrorismo e injurias contra la Corona, el Gobierno informó a última hora del pasado lunes sobre la intención del Ministerio de Justicia de reformar el Código Penal para que estos delitos no conlleven penas de cárcel. Apenas unos minutos después, la formación morada comunicó su decisión de registrar en el Congreso una proposición de ley para la protección de la libertad de expresión.

En la rueda posterior al Consejo de Ministros, la portavoz del Ejecutivo ha explicado que este gesto se debe al intento de los morados por situarse "en mejores condiciones" de cara a los comicios. "Estamos en campaña electoral y algunas formaciones quieren apadrinar, capitanear o patrimonializar algunas cuestiones solo y llanamente porque el domingo tenemos elecciones y todas las formaciones se quieren situar en posición de ventaja", ha reiterado Montero.

En manos socialistas

La dirigente socialista ha explicado que el anuncio sobre los planes del ministro de Justicia, Juan Carlos Campos, parte del "propio convencimiento" de la coalición por poner fin a una realidad que provoca malestar en la sociedad. Sin embargo, fuentes de Unidas Podemos señalan que el pasado lunes informaron al PSOE de su propósito de registrar la proposición de ley y que fue entonces cuando los socialistas movieron ficha. "Yo derivaría a un elemento menor cuál es la iniciativa primera", ha afirmado Montero tras asegurar que desconoce cómo se desarrollaron los hechos.

No obstante, la ministra portavoz ha restado importancia a la iniciativa presentada por Unidas Podemos y ha hecho hincapié en varias ocasiones en que una reforma semejante del Código Penal deberá ser liderada por los ministerios de Justicia y de Interior. A este respecto, ha apuntado que los cambios respecto a la libertad de expresión se prevé que se incluyan en la reforma global del CP en la que trabaja Campo y que incluye una reforma del delito de sedición, la introducción del consentimiento de la mujer o materias relacionadas con la protección del medioambiente. "Si hubiera alguna necesidad de extraer esta parte y acometerla de forma expresa así se haría", ha dicho sobre los delitos relativos a la libertad de expresión.