El CSIF denuncia el criterio seguido por el Gobierno de Zaragoza para reservar dos plazas para mujeres víctimas de violencia de genero (una de socióloga/o y otra de oficial de guardallaves) y discrepa sobre cuál ha sido las pautas de selección de los técnicos municipales o de los responsables políticos del área de personal para que la reserva se haga en estas plazas concretas.

"Reservar una plaza de grupo A1, teniendo en cuenta 'Los Indicadores para conocer y profundizar sobre la violencia de género en Aragón' del IAM (Instituto Aragonés de la Mujer) no parece lo más adecuado, ya que como podemos observar en la tabla 31 de este informe del IAM, a esta plaza únicamente podrían optar las mujeres con estudios superior que suponen menos de un 5% de las mujeres víctimas de violencia de género con los datos de Zaragoza (12) o un 8% de las de Aragón (47)".

"Si sólo el 5% de las mujeres víctimas de violencia de género en Zaragoza y el 8% en Aragón, tienen estudios superiores y teniendo en cuenta el número de titulaciones superiores existentes (entre unas 80 actualmente y unas 120 antiguamente) la probabilidad de que sean Sociólogas, es de 1 entre 2000, aplicado a Zaragoza o de 1 entre 1250 aplicado al conjunto de Aragón".

"Que solo un 0,05% y un 0,08% de mujeres víctimas de violencia de género en Zaragoza y Aragón respectivamente puedan optar a esta plaza es muy preocupante, ya que el objetivo de esta reserva es que pueda servir de oportunidad al mayor número posible de estas mujeres".

El CSIF estima que, con esta decisión, el Ayuntamiento de Zaragoza, "está excluyendo de poder optar a una plaza de funcionaria municipal al 95% de las mujeres víctimas de violencia de género de Zaragoza o un 92% si se toman los datos de Aragón". Tampoco considera que se haya planteado mejor el puesto de guardallaves, "ya que a esta plaza no podrían optar un 24% de las mujeres víctimas de violencia de género de Zaragoza o un 18% de las de Aragón. También sería necesario indicar que en la actualidad la plantilla de oficiales guardallaves esta integrada al 100% por hombres, lo que supondría un serio problema a la hora de proteger el anonimato de la mujer víctima de violencia de género que accediese a esta plaza, entre otros. Por no señalar también que en el último proceso selectivo libre para esta plaza no se presento ninguna mujer".

"Esta decisión del Ayuntamiento de Zaragoza aún tienen menos sentido, si en la negociación nos manifiestan que les parece de sentido común que plantemos que la reserva se haga en otras plazas (oficial y maestro inspector), pero que sólo aceptarán el cambio sí les firmamos la OEP 2018, porque si no, volverán a su planteamiento inicial".