El partido conservador Nueva Democracia (ND) ganó ayer con mayoría absoluta las elecciones legislativas griegas, poniendo con ello fin a más de un década de gobiernos socialistas, según los primeros resultados oficiales de anoche, que confirmaron los sondeos a pie de urna. El líder de ND, Costas Caramanlis, sobrino del estadista Constantino Caramanlis, se convertirá a los 47 años en el primer ministro más joven de la historia de Grecia.

Con el 19% de los votos escrutados, la conservadora ND logró el 45,25%, 167 escaños, seguida de los socialistas del Movimiento Socialista Panhelénico, que consiguieron el 40,64% de los votos (123 diputados). El Partido Comunista de Grecia (KKE) obtuvo el 5,11% de los sufragios, que le otorgan cinco escaños. Según los primeros resultados oficiales, sólo estas tres formaciones entrarán en el Parlamento, del que sale la Coalición de Izquierda (SYN), que no superó la barrera del 3% de los votos necesarios para seguir representada.

SEGUNDO INTENTO Caramanlis ha conseguido devolver al poder a su partido después de 10 años en la oposición en su segunda oportunidad, pues ya lo intentó en las elecciones del 2000, cuando perdió por poco más de un 1% de los votos. En esta ocasión se ha enfrentado a un miembro de otra de las familias históricas de la política griega, Georges Papandreu, hijo Andreas Papandreu, fundador del Pasok, fallecido en 1996.

Nada más conocerse los sondeos, simpatizantes de Nueva Democracia salieron a las calles de las principales ciudades para festejar la victoria. Ante la sede de ND en Atenas, un mar de banderas griegas y blanquiazules (los colores del partido) aclamaban a los dirigentes. "Es una victoria grande y limpia para Democracia", afirmó Georges Soufias, número dos del partido conservador.

Antes de conocerse los resultados, Papandreu hizo unas declaraciones en la televisión en las que reconoció su derrota y felicitó a su rival. "Nueva Democracia ha ganado las elecciones. Deseo a Caramanlis éxito por el bien de Grecia", dijo.

Los Juegos Olímpicos de Atenas, en agosto, y las conversaciones para la reunificación de Chipre serán los asuntos prioritarios en los que deberá volcarse el nuevo Gobierno.

Una de las sorpresas que arrojaron los comicios fue el resultado del partido de extrema derecha LAOS (Alarma Popular Ortodoxa) que, según los sondeos, logró entre el 1,8% y 2,8% de los votos.