El padre de la bomba atómica paquistaní, el científico Abdul Qader Jan, confesó que desvió información secreta de sus investigaciones nucleares en favor de Irán, Libia y Corea del Norte, según informaron ayer fuentes oficiales en Islamabad. El científico, convertido en un héroe nacional, admitió haber pasado a estos tres países, durante 15 años, los diseños para que pudieran fabricar armas atómicas. Jan fue descubierto después de que la ONU averiguase hace dos meses que Pakistán estaba involucrado en el programa nuclear iraní.