3--A pesar de su juventud, usted tiene una dilatada experiencia en la gestión de plazas, pero ¿qué ha supuesto la adjudicación de Calatayud?

--Un paso hacia adelante en mi carrera profesional, eso es indudable. Llevo siete años gestionando festejos en varias plazas pero, hasta el momento, la de mayor categoría y entidad empresarial es la de Calatayud. El aforo es muy alto, con casi 9.000 localidades; se organizan dos corridas de toros y varios concursos nacionales dentro de los festejos populares, lo que está muy por encima de las programaciones que se puedan llevar a cabo en localidades más pequeñas. Todo ello supone un aumento de responsabilidad y riesgo, pero a la vez mayor satisfacción profesional.

3--En los carteles presentados este año aparecen importantes figuras. ¿Qué ha tenido en cuenta a la hora de configurarlos?

--Al confeccionar un cartel hay que tener en cuenta varios factores, como la categoría de la plaza, el momento por el que atraviesan toreros y ganaderías, los gustos de la afición y el presupuesto. En mi caso, además, me gusta contar con matadores jóvenes y con aragoneses para que puedan torear en las plazas de su Comunidad. Por eso en Calatayud, junto a toreros ya consagrados como Antonio Ferrera y David Mora, aparecen otros con menos tiempo en el escalafón superior, pero con proyección como Jiménez Fortes, y aragoneses como Paulita, Alberto Álvarez, que se presenta en esta plaza, y el rejoneador Mario Pérez Langa, que es de aquí. No me gusta escatimar tampoco en la elección de los toros, pues ahí está la base del triunfo de los toreros, por eso los encierros de Núñez del Cuvillo y de Domínguez Camacho estoy seguro de que colaborarán en el éxito.

3--¿Hasta qué punto es importante el apoyo de los aficionados?

--La afición, junto a toros y toreros, se constituye en uno de los tres puntales básicos sobre los que descansa la fiesta. Yo le tengo el máximo respeto y la escucho para intentar satisfacer sus gustos. Junto a los aficionados debe trabajar el empresario para que los tendidos se pueblen y se refuercen.

3--En tiempos de crisis, ¿considera un riesgo esta nueva andadura?

--Organizar espectáculos entraña un riesgo. Tenemos que acertar con las combinaciones, las fechas, los precios y nos debe respetar el tiempo, pero es algo que ya sabemos los que hemos elegido esta profesión.

Yo lo que espero es haber conseguido satisfacer los gustos de la afición que acude a la plaza de 'Margarita' y que se llenen los tendidos, pues será bueno para la fiesta y por tanto para los profesionales que vivimos de ella y para ella. La crisis debilita mercados, pero agudiza el ingenio y refuerza a los más creativos y a los que no tiran la toalla.

3--¿Con qué apoyo cuenta?

--El mejor apoyo que uno tiene es su trabajo y su profesionalidad. Y quiero creer que por eso estoy en Calatayud gestionando su plaza, porque mi bagaje profesional y mi propuesta artística ha gustado a quienes deciden en esta plaza. No voy a negar que estoy muy agradecido al Ayuntamiento de Calatayud, al Patronato y a la Comisión de Interpeñas , así que ahora debo ser yo el que sepa estar a la altura de lo demandado y pueda seguir trabajando muchos años en una plaza histórica que da categoría y goza del máximo respeto de todos los profesionales.